Sorpresa con esta novela. Esperaba un libro amable y extravagante de esta autora, como los que he he leído de ella hasta ahora, pero me he encontrado con un libro más serio y casi con tintes de biografía. Conforme leía, la historia me recordaba muchísimo a la de Harper Lee y su lucha constante para permanecer en el anonimato después de ganar el Pulitzer con "Matar a un ruiseñor". Pensaba en ello y en su relación tan "especial" con Truman Capote. Y al llegar a las notas finales de la autora, todo se aclara, no os digo más para que lo leáis. A lo largo de la narración podréis ver alusiones a Carmen Martín Gaite, Carmen Laforet, Antonio Tabucci y Etgar Keret. ¿Recomendaría este libro? Sí, sin duda alguna. La prosa de Sánchez que tanto me gusta, añadida a un homenaje a esos autores cuyas obras son auténticos partos sin epidural. Nos muestra como cada autor tiene una diferente manera de enfrentar la fama y de entender la escritura |