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Vika es una chica que vive con su padre, ella no es normal, vive en una isla aislada porque es maga, la única de toda Rusia, o eso piensa ella. Allí aprenderá a utilizar sus poderes para sobrevivir y curar animales, aunque su magia es principalmente elemental. Nikolái es un kazajo de la estepa, pero su mentora lo compró al saber de sus poderes. Lo adiestra en el arte de hacer magia con objetos inanimados, es experto en construir con su magia todo tipo de cosas, y sobre todo de utilizarla a través de las paredes. Los dos tienen magias muy diferentes y tendrán que enfrentarse en el juego de la corona, el ganador se convertirá en el consejero del zar y mago imperial, el perdedor morirá. La narración de la novela me ha gustado mucho, es en tercera persona pudiendo conocer no solo los pasos y pensamientos de los dos protagonistas, sino que también de los secundarios. Así la autora no los deja de lado, nos sumerge en cada una de sus acciones, llegando a conocerlos igual de bien que a los principales, teniendo un gran peso en la historia. La lectura es muy fluida y sobre todo adictiva, siempre me cuesta algo más el principio de los libros, pero en este caso no, ya que, desde el primer capítulo la magia nos envuelve y continuará así el resto de la novela. al principio había saltos de tiempo, en un momento la narración se encontraba en presente como de repente pasaba a narrarnos un hecho del pasado, pero estos cambios son fundamentales para seguir toda la trama, y no dificultan la lectura. Otra de las cosas que nos encontraremos son términos en ruso, pero son pocos y la autora nos los muestra de una manera que enseguida nos quedaremos con su significado, y poco a poco los tomé como algo normal en la lectura. Una de las grandes bazas de este libro es la magnífica ambientación. En este aspecto tengo que decir que la autora ha trabajado mucho y se ha documentado muy bien (Es licenciada en historia y literatura Rusa). Diréis ¿Si es ficción, cómo puede haberse documentado? Pues os lo voy a explicar, la autora nos sumerge en una historia de ficción, pero muchos de los acontecimientos y hechos históricos de la Rusia del siglo XIX están documentados en la novela, haciendo que todo parezca más real. Algunos de los personajes que nos encontramos existieron de verdad, uno de ellos son el zar Alejandro I y su esposa Isabel. Los edificios y los escenarios son todos reales, existen aún hoy en día, adentrándonos de una manera increíble en la Rusia de aquella época. Conoceremos partes de toda Rusia, aunque el escenario principal es San Petersburgo. Los personajes me han gustado mucho, tanto los secundarios cómo los principales, todos los he sentido muy reales, aunque el que más me ha gustado ha sido Pasha, que es el heredero al trono de Rusia. Todos ellos han puesto su granito de arena a una historia que me ha encantado y que he disfrutado mucho. Las personalidades de cada uno de los personajes se nos irán mostrando, e iremos conociendo sus debilidades y sus virtudes, y cómo cada uno de ellos sucumbirá a la atracción que ejerce la magia. Además de que veremos como según avanza el juego cada vez se pondrá todo más y más interesante entre ellos, incluso veremos cómo la atracción los guiará poco a poco a un romance prohibido. Esta parte de la novela es la que no me ha llegado a convencer del todo, la verdad es que el romance que surge creo que es algo repentino, aunque tendrá un gran salto a su favor al final de la novela. No quiero terminar esta reseña sin comentar los giros argumentales, no son muchos, pero son suficientes para mantener nuestra atención. Hay uno en concreto que me dejó muy sorprendida, no me lo esperaba para nada, es casi al final, haciendo que estas últimas páginas sean aún más adictivas. Estoy deseando leer la siguiente parte ya que el final ha sido increíble, quiero saber más de estos personajes y como seguirá toda la historia. En otoño podremos seguir y descubrir con qué nuevos giros nos sorprenderá la autora y que resolución dará a todo este conflicto. Enlace: https://rubiesliterarios.blo.. |
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