No me gustó mucho este tomo, el tercer de la serie con Bevilacqua y Chamorro porque se extiende más sobre el estado de ánimo la la Guardia Civil que sobre los personajes investigados. Se trata de investigar una degollación en la isla de la Gomera dos años atrás, perpetrada en un chico de buena familia. Es el humos de Lorenzo Silva que salva esta lectura. |