Mi debut literario con Lorenzo Silva ha sido una gran primera cita y mucha culpa de que El lejano país de los estanques me haya conquistado la tiene su pareja de protagonistas: el sargento Bevilacqua y la agente Chamorro. ¡Enormes ambos! Hubo un jugador en la NBA que se llamaba Larry Bird que no era rápido, ni fuerte, saltaba poco..., pero era muy inteligente en la cancha y sabía maximizar sus virtudes. ¡Un grandísimo jugador! Vila y Chamorro me recuerdan a Larry porque también son "0ld school" y porque no necesitan sorprendentes trucos para destacar. En esta novela brillan como luciérnagas en la noche mallorquina. Mi primera cita con Lorenzo Silva se me ha hecho corta y eso siempre es buena señal. ¡Repetiré! |