Vicious

Baron Spencer, más conocido como Vicious, era despiadado y cruel a los diecisiete años y lo sigue siendo a los veintiocho.

Emilia LeBlanc es cariñosa, agradable, confiada y buena persona. Los sucesos ocurridos en su último año de instituto no han logrado cambiarla.

"Vicious" es una intensa novela romántica con dos líneas temporales y narrada en primera persona a dos voces.

La familia de Millie llega a California para trabajar en la mansión de los Spencer. La joven tiene un mal encuentro con el hijo de la familia que marcará su estancia en el instituto, dominado por el joven Vicious y los otros tres buenorros del instituto All Saints.

El joven Spencer odia a la chica y no duda en dejarlo patente en público. Y el odio y el desprecio siguen vigentes cuando se reencuentran en Nueva York años después. Para él las personas son intercambiables y desechables cuando dejan de ser de utilidad. Y la hija de la criada no es diferente. Es un personaje muy intenso con el que cuesta empatizar en un primer momento.

Millie es buena persona pero no es tonta. Tiene claro que Vicious se deshará de ella cuando ya no la necesite. Me gusta que tenga los pies en la tierra y que la atracción que siente no la ciege. Para ella la familia es muy importante y no duda en aparcar su vida para ayudar a su hermana pequeña.

Ambos personajes están estupendamente creados. Como la narración alterna entre pasado y presente se descubren poco a poco los motivos de Vicious para ser como es lo que nos permite entenderle mejor.  

Trent, Dean y Jaime son sus mejores amigos en el instituto y lo siguen siendo de adultos. No en vano los cuatro son los propietarios de CBAS, una potente empresa con sedes en Los Ángeles, Nueva York, Chicago y Londres. Los tres son importantes tanto en la trama actual como en la del pasado.

Me ha encantado el libro. Está escrito de tal manera que atrapa desde la primera página. La lectura es muy intensa, puede que por el uso de la primera persona que hace todo se sienta más personal.

El hecho de que alterne presente y pasado hace que te enganches sin remedio y que necesites leer más. La lectura me ha durado apenas un par de días.

Me encanta la evolución del protagonista masculino. El proceso de cambio es lento y por ello resulta creíble. No me gusta cuando personajes tan odiosos como éste se transforman en buenas personas de un día para otro. Tampoco cuando ellas perdonan sin mediar arrepentimiento.

Me animé con la novela por un impulso que resultó acertado. Me han encantado tanto la historia como la pluma de la autora. Iba a ciegas con ella porque es mi primer libro suyo, pero he quedado encantada con la experiencia y estoy deseando leer las historias de los secundarios, ya que prometen ser interesantes. Espero poder leer sus libros pronto.

Os animo a darle una oportunidad a la autora. Yo voy a ver si me hago con su anterior obra, que creo que es independiente, porque ha sido una agradable sorpresa.