El mortal inmortal

Me encantó. A pesar de que la historia necesite más desarrollo en algunos puntos, es una triste reflexión sobre la inmortalidad, eso que algunos desean con tanta liviandad. Shelley pone otra vez el acento en el hecho de desafiar a las leyes de la Naturaleza, así como lo hizo en Frankenstein.

Winzy es un aprendiz de Cornelius Agrippa a quien un buen día se le ocurre tomar una de las pociones que debía cuidar. El joven está enamorado de una mujer un poco cruel y, debido a un desaire de ella, decide que necesita "curarse" del amor. Cuando no encuentra los resultados esperados se da cuenta de la verdad: el brebaje concedía la inmortalidad.

Breve, conciso y sin florituras innecesarias en el lenguaje, El mortal inmortal se explaya en las penas de alguien maldito por la inmortalidad (o longevidad, ya que Winzy no está seguro del efecto exacto del elixir que bebió). La soledad del ser humano, la vergüenza de no moverse entre círculos sociales y el despecho son algunos de los temas que se tocan. El principal está relacionado con la soledad, por supuesto, aunque me hubiera gustado ver también un poco más de los otros. Debido a la extensión del cuento, quedan planteados pero no desarrollados. Sin embargo, El mortal inmortal es entretenido y da para pensar en aquellas cosas que hacemos todos los días para que no se note el paso del tiempo mientras éste se nos ríe en la cara.

Que es más espantoso, la muerte dolorosa, súbita, inoportuna, o la incapacidad de acceder a ella, el ver desfilar hacia el destino fatal a todos aquellos que nos rodean sin poder acercarnos, con la incertidumbre de si podremos alcanzarlos.

Una larga carrera donde rezagados, retrasados contemplamos tras años de larga marcha la meta aun lejana tras extenuantes , emocionalmente, jornadas. Como aquel japonés que curiosamente terminó un maratón a muchos años de haberlo iniciado. (Shizo Kanakuri) o el portugués que falleció durante el mismo ( Francisco Lázaro) . Ambos con ciclos incompatibles con el sino natural.

Mary Shelley, explora desde un unto de vista espiritual y romantizado esta disyuntiva, con un texto que acerca a sus obras o las referencia, “ el ultimo hombre”. “ Frankenstein” , e incluso “ un sueño” llevan su parte en este corto relato de …¿ Terror? , para algunos puede ser, el miedo a morir, el horror de nunca hacerlo, o lo que nos aqueja a todos la desesperación de dejar algo inconcluso… y el recurrente pensamiento del suicidio. Tan romantizado como execrable porque “ la muerte de cualquier ser humano me disminuye “

Mary Shelley es mucho, pero mucho más que mujer de Percy Shelley y autora de Frankenstein.. una mujer adelantada a su época con una amplia visión del mundo mas allá de lo reconocido por los simples sentidos…

El mortal inmortal, es un breve relato de un hombre que cree necesitar curarse del amor, y así decide tomarse la pócima que su maestro alquimista estaba preparando. Obviamente cura para el amor no había, sino la historia sería otra.

Todo el libro es la narración de la vida mortal de este inmortal, su enamoramiento, su vida en familia, pero por sobretodo una reflexión profunda sobre lo que significa ser inmortal, vivir para siempre sin envejecer, ver a tus seres queridos morir, es en sí, una reflexión sobre la soledad extrema, sobre el ser diferente y no encajar en la sociedad.

Mary Shelley logra hacer que el lector sienta la profunda tristeza y desesperanza del protagonista, y además hacerte reflexionar sobre ese afán que ha tenido siempre el ser humano de poder vivir para siempre