De la cólera

"¿Qué hay más descansado que la tranquilidad del espíritu, que más agotador que la ira? ¿Qué más relajado que la clemencia, qué más atareado que la crueldad? El pudor tiene tiempo libre, la lujuria está ocupadísima"

Primera obra filosófica que leo de Séneca, en este caso, se trata de un análisis de la ira. Sobre todo hablar de la negativa influencia que puede tener sobre el ser humano y una gran sugestión a no dejar que aparezca en nuestra vida diaria. Porque: "No hay ningún sentimiento sobre el que no domine la ira". Lo gravitante es que este vicio no concuerda con la naturaleza humana según el autor.
Para ello Séneca utiliza el estoicismo en toda su amplitud. Dejar pasar las ofensas, no reaccionar, no dar pábulo a personas inferiores, evitar dejarnos controlar por la ira (a la que nada se puede oponer) y garantizar que la ira siempre trae consecuencias negativas aunque en apariencia pueda dar poder o fuerza. Para ello, utiliza una serie de eventos cotidianos pero también de múltiples ejemplos históricos. Claro, siempre adaptado a lo que él considera como correcto. Menciona a Jerjes, Escipión, Aníbal, Calígula y un largo etcétera que en algún momento sufrieron a causa de dar oídos a la ira.
Me gustó también algunos consejos que se dan sobre la crianza. Sin embargo, debo decir que no me ha maravillado, sobre todo porque a mi edad y con tantas experiencias es poco probable que acepte a raja tabla muchas cosas más si es en estilo de vivir. Por otra parte, la manera de ejemplificar y demostrar eventos con algunas cosas o usar comparaciones no me han parecido tan convincentes. Es un libro que en este sentido sí se siente antiguo.

"Venganza es una palabra inhumana y no obstante acogida como lo justo"