Ensayo sobre la ceguera

El semáforo se ha puesto en verde. Los coches arrancan. Todos menos uno. Dentro un hombre grita que se ha quedado ciego. No será el único. Poco a poco los casos irán aumentando rápidamente. El gobierto tomará la decisión de apartar a estos ciegos del resto de la sociedad, ya que se teme una epidemia.

Quizás esta sea una de las distopías más interesantes que he leído. Sin necesidad de cosas muy llamativas o estrambóticas, nos presenta una sociedad donde los peores y mejores instintos del ser humano se mezclan en estas situaciones límite. No existe la bondad por naturaleza, pero tampoco la maldad. Creo que muestra un debate maravilloso.

Me gustó mucho ver la vulnerabilidad de las personas al no ver, y más aún si nadie ve. Realmente te hace pensar si, pudiendo ver el horror que se estaba desatando, preferirías estar ciego o no. Muy muy interesante.

Llevaba siglos queriendo leer esta novela, y ha sido una lectura tensa, agobiante, y dura en algunas partes, pero muy gratificante e interesante. El final me gustó también mucho, creo que no necesitaba nada más que lo da. Si no le he puesto la máxima nota es porque hay un capítulo que no me gustó, por ciertas acciones innecesarias y poco realistas de un personaje femenino. El resto es impecable.