Estación de tormentas

Es la última entrega de "La saga del Brujo", aunque cronológicamente se sitúa entre los dos primeros libros de la saga, “El último deseo” y “La espada del destino”, y sirve como un puente entre ellos. Aunque se puede leer como una novela autoconclusiva e independiente, se disfruta mejor como parte de la saga más amplia del Brujo, ya que algunos elementos de la historia pueden ser difíciles de comprender para los lectores que no estén familiarizados con los libros anteriores.

El libro comienza con Geralt, que se encuentra en un punto de inflexión en su vida, enfrentándose a decisiones difíciles y a su propio pasado, mientras llega a Kerack después de uno de sus encargos. En esta ciudad en medio de una revuelta política y social, Geralt es encarcelado al ser acusado de desfalco por Coral, la hechicera del reino. A medida que la historia se desenvuelve, Geralt se ve envuelto en una trama de traición, conspiración y manipulación por parte de distintos personajes, incluyendo a algunos conocidos de entregas anteriores.

Como siempre, la escritura de Sapkowski es una delicia, con una prosa rica en detalles y con un estilo narrativo ágil y envolvente que mantiene al lector interesado. A lo largo de la historia demuestra su habilidad para crear un mundo complejo, lleno de personajes memorables con diálogos magníficos e inteligentes y giros inesperados. Además de los momentos de acción y humor sarcástico a los que nos tiene acostumbrados, también encontramos situaciones conmovedoras y nostálgicas, con guiños a varios personajes de la saga.

Aunque es una historia más corta y sencilla, el autor logra transmitir mucho más que en "La Dama del Lago". El final me ha gustado mucho y considero que es una mejora en comparación con el final de la saga principal. En mi opinión, después tal decepción, era necesario esta precuela que logra recuperar la esencia de lo que fue Geralt en los primeros libros.

En general, " un libro muy entretenido, que se lee fácil y rápidamente. Los fanáticos de la fantasía y seguidores de la saga del Brujo disfrutarán sumergirse una vez más en el mundo oscuro y complejo de Geralt de Rivia.

"Guardaos de los desencantos, porque engañan las apariencias. Tal como aparentan ser, son las cosas raramente."

Una gran frase de esta novela que representa los prejuicios que llevaba con la misma antes de darle la oportunidad que se merece. Pues es un libro precuela que se sitúa entre los dos primeros compendios de relatos, El último deseo y La espada del destino, que dan comienzo a la saga del brujo. Lanzada a la par que el videojuego The Witcher 3, todo hacía prever que su publicación tendería más hacia lo comercial que otra cosa. Nada más lejos de la realidad, Estación de tormentas está a la altura del resto y la catalogo como imprescindible para los amantes de la obra de Sapkowski.

Estación de tormentas es puro Geralt de Rivia. Es una novela donde acompañamos al brujo en su totalidad, mientras que en las distintas entregas observábamos un reparto coral, e incluso echamos de menos a Geralt, aquí encontraremos aspectos esenciales de su mitología, como la mística de las distintas espadas o la transformación de los brujos. Además de un relato mordaz, de diálogos punzantes y personajes malencarados que le otorgan un envidiable ritmo a la narración. Marca de la casa.

Sapkowski tenía algo más que contar, por eso Estación de tormentas está más que justificada y es esencial para los amantes de la saga. Nos regala una precuela que es puro disfrute, aventuras y desventuras de nuestro amigo Geralt, donde es el cabeza de cartel y eso nos encanta. Una novela autoconclusiva incrustada entre los libros de relatos, con gran desarrollo narrativo y todos los elementos que hacen de The Witcher una de las sagas referentes en la fantasía medieval.

Cuando termine el libro “La dama del lago” pensé que ya podía dar por finiquitada lo que es,en esencia, la saga de Geralt de Rivia. Que el libro que nos ocupa “Estación de tormentas” no iba a aportar nada que no supiéramos sobre esta historia. Y realmente no lo hace, pero he terminado de leerlo con una sensación de fin de ciclo mayor, incluso, que con el séptimo libro. Creo que en esto ha tenido que ver el epilogo. No nos dicen que fue lo que paso realmente al final con los personajes, de hecho ahonda aún más en ese misterio y en la sensación de incredulidad y bruma que deja el final, propiamente dicho, de la saga, ya que deja la puerta más abierta (si cabe)a la idea de que la historias de Geralt de Rivia, como todas las buenas fábulas, es atemporal.

Siento mucho empezar por el final de libro, pero es que ha sido este punto lo que más me ha llamado la atención de un libro que realmente me ha gustado. Incluso aunque haya habido unos días en los que, por alguna extraña razón, no podia avanzar en la lectura, pero creo que eso se debía más a mi estado anímico que al libro. Aunque por otro lado estamos hablando de un libro que actúa como precuela de una historia de la que si no has leído antes sus libros hara que no entiendas este que nos ocupa.

Y es que, como he dicho, el libro en si me ha gustado mucho, bastante. Me ha recordado mucho a los dos primeros, de hecho yo lo definiría como uno de los cuentos de esos volúmenes, solo que con mayor envergadura y duración. Quizás sean sensaciones mías, pero note que en esta obra Sapkowski escribía con más soltura, que se percibía que estaba más libre a la hora de componer la historia, al no tener el handicap de todas las tramas que había en la saga, y que no eran pocas, y que, lo quieras o no, eran las que marcaban los tempos. Aquí se nota al autor polaco más suelto, la trama fluye sin ningún problema.

Otro punto que me ha gustado mucho es que Sapkowski no se limita a seguir hablando de cosas o conceptos que los lectores ya conocían, sino que sigue expandiendo el universo de la saga, y lo hace de una forma que resulta de lo más natural. Además, los recursos que usa el polaco para narrar están mejor condensados que en los otros libros. Quizas sea por que me ha acostumbrado a que se pase de pronto de la narración a las cartas, o porque no hay tantos de estos cambios a lo largo de la lectura, pero estos cambios me han parecido muy bien llevados

Quizás lo que me ha gustado es ver al Geralt de los primeros libros, el hombre que, sin dejar de ser un cínico, es también un tanto iluso, y que confía, aún, en las personas y la humanidad. Resulta interesante ver a ese Geralt y comprarlo con el que acaba siendo al final de la saga. La gran incorporación en lo que a personajes se refiere es el de la hechicera Lytta. Como todas las féminas de esta historia es un carácter fuerte y muy bien perfilado, si. Pero no me ha acabado de caer bien, y no porque estuviera mal construida. de hecho creo que lo esta tan bien que desde el principio la percibí como un ser muy manipulador. Y por eso no acabo de caerme bien, yo creo. A ellos se suman toda una caterva de personajes secundarios o antagonistas muy humanos y bien construidos, entre los que debo destacar al de Sorel. El personaje de Jaskier, una vez más, no aporta mucho a lo que es la trama, la verdad, pero como contrapunto a Geralt y personaje cómico, sigue sin tener precio.

Otro punto que me ha gustado mucho (como ha cualquier fan de la saga, seguramente) es la cantidad de guiños a hechos y personajes que han aparecido a lo largo de la historia. He disfrutado mucho con ellos.

Este ya si que si es el final de una de las mejores sagas fantásticas que han aparecido en los últimos años, y es un final excelente que encantara a los fieles de la historia y que deja con muy buen sabor de boca.

En 2015 Sapkowski nos sorprendió a los lectores españoles con un nuevo libro de la saga Geralt de Rivia, esta vez en forma de precuela. Desconozco si es único o está trabajando en más libros. Realmente poco importa porque, como tarda tantos años en escribir, ya he aprendido a no esperar nada y llevarme la sorpresa un día cualquiera visitando la librería.

Estación de Tormentas se trata de uno de los libros más aventureros de Geralt. Un maravilloso enredo de situaciones que se enlazan unas con otras casi sin darnos cuenta, o como diría Jaskie "una cadena de casualidades desafortunadas". Me gusta que este libro sea puramente Geralt y que otros personajes no le roben el protagonismo.
Nuestro querido Jaskie, el mundialmente conocido poeta y mejor amigo de Geralt, se cruza en el errante camino del brujo en ciudades y pueblos de todo el mundo. La cantidad de veces que esto ocurre a lo largo de la serie parece inverosímil, pero el mujeriego trovador es uno de los mejores personajes de toda esta historia y los lectores no podemos evitar perdonar a Sapkowski por querer brindarnos una vez más con la aparición de Jaskie.
A lo largo del libro conoceremos personajes nuevos, como la hermosa hechicera Coral o, Addario Bach, un enano que acompañará a Geralt durante una de sus aventuras. También tenemos menciones de otros personajes que los lectores ya conocerán y alguna que otra sorpresa. de hecho, el Epílogo sólo lo podrás apreciar como se merece si has leído toda la saga de The Witcher. Fue una alegría porque muestra un pequeño fragmento de lo que ocurre después de los acontecimientos ocurridos en La dama del lago. Por supuesto, este libro se puede leer de forma independiente, pero sí que tiene esos pequeños detalles para los fans de la saga.

Normalmente en la literatura de fantasía los escritores tratan de mostrar obras con bellas descripciones y pasajes que transporten al lector a lugares de ensoñación, en cambio, Sapkowski tiene una forma muy particular de escribir. Aunque sé que no es la primera vez que lo comento, quiero recalcarlo de nuevo poniendo un ejemplo. al principio del libro, Sapkowski describe con todo lujo de detalles cómo Geralt entra en una habitación apestosa con penetrante olor a pedo, y termina rematando el párrafo diciendo que allí sólo había mujeres. ¡Al instante me sacó una sonrisa! Con una sola palabra hizo que la situación cobrara más interés para mí. Me encanta su picardía y cómo juega con las expectativas del lector.

Existe una serie de capítulos "Interludios" que muestran información relevante para la historia. Entre ellos me gustó mucho el inicio del capítulo 13; tan agradable como inesperado.
En general el libro se lee muy bien, es muy entretenido y variado con la caza de demonios, magia corrupta, luchas monárquicas y un enfrentamiento con criaturas sobrenaturales. Además, el final me gustó mucho.

Ahora sólo queda por leer Camino sin retorno. No estoy preparada para despedirme de Geralt, de hecho, con este libro se han renovado más que nunca mis ansias de conocer más aventuras de nuestro querido brujo.

Saludos ;)

Es el segundo libro que leo de la saga, siguiendo estas cronologías que se publican ahora en internet dado el éxito de The Witcher, y la verdad es que los relatos de "El último deseo" me gustaron más. Aquí la historia se resume en que a Geralt le roban sus espadas y en sus intentos por recuperarlas se va metiendo en líos por el camino con una variedad de personajes, unos más entretenidos que otros. Así que ha habido pasajes que me han gustado más y resultado más entretenidos, y otros que se me han hecho más pesados.

Algo que no deja de llamarme la atención de la saga es la variedad de tonos y de usos del lenguaje que te puedes encontrar en una sola novela. Unas veces parece castellano antiguo; otras veces tiene expresiones más modernas... Y me descoloca. No sé si en el idioma original es igual o es cosa de la adaptación al español.

Aún así, seguiré leyendo la saga porque el personaje de Geralt en sí me gusta mucho.