La luz que perdimos

Con este libro he sentido tantas cosas que me son tan difíciles de explicar...
Para empezar, la relación que tenían Lucy y Gabe me gustaba mucho, pero también había algo que no me gustaba nada. Eso hacía que la balanza estuviera muy equilibrada tanto en lo bueno como en lo malo.
Me ha parecido una historia de amor bastante intensa que he sufrido más que amado. Aun así, me ha encantado el dramatismo que mantiene el libro en todo momento.
En cuanto a los personajes principales:
Lucy me ha parecido una mujer de los pies a la cabeza. La mayoría del tiempo sabía lo que quería. Feminista y una mujer que se valoraba a sí misma y a su trabajo.
Gabe, un hombre soñador, que no ha pasado por una infancia fácil y que por eso creo que toma las decisiones que toma en la relación que tiene con Lucy. En más de un momento me ha parecido una persona muy egoísta.
Darren, otro personaje clave en la vida de Lucy que le enseñará de otra forma. Gracioso y amable, pero con algunos puntos machistas que en algún momento me han llegado a ofender.
Ha sido un libro que me ha gustado mucho, por su capítulos cortos (amo los capítulos así) y por el vicio que produce querer saber más sobre lo que pasa en la relación de los personajes.
Pero (lo siento, pero tenía que haber un "pero"), me esperaba un final mucho más dramático. Quizá, much@s de los que hayáis leído el libro no estaréis de acuerdo con esto último que acabo de decir, pero en mi opinión, el final se me quedó corto.
Aun así, recomiendo mucho el libro, y creo que, a más de una persona que lea mi reseña le gustará.