En plena noche

Mikel Santiago nos transporta de nuevo a Illumbe, pueblo imaginario del País Vasco que conocimos en su anterior novela "El mentiroso" y que, aunque no es necesario leer, sí está bien para reconocer a algunos personajes que aparecen en "En plena noche", cuyo arranque me ha parecido extraordinario, así como la voz narrativa de Diego, dentro del estilo al que el autor nos tiene acostumbrados. 

Una trama cargada de intriga, bien hilada y perfectamente pensada, con una narrativa ágil y sencilla dividida en capítulos muy cortos, por lo que, aunque tiene más de 600 páginas, se lee del tirón en pocos días. Resulta adictiva, te atrapa, te sientes Diego, un personaje más dentro de un escenario como es Illumbe de lo más hipnótico y tétrico en ocasiones. Es fácil empatizar con los personajes, que cobren vida en tu imaginación y sentirte como ellos, en la mayoría de ocasiones con una fuerte carga de culpabilidad y frustración.  

Con el misterio de la desaparición de Lorea hace veinte años sumado a la misteriosa muerte de Bert a causa de un incendio, la intriga está más que asegurada, así como giros que no ves venir y que te incitan a no poder dejar de leer. 

Thriller muy recomendable, me ha encantado.