Un café a medianoche

La historia nos presenta a Alana, una joven que regenta un pequeño bar junto a su amiga Candela. Ambas se embarcaron en este proyecto con muchísima ilusión hasta que abrieron su bar junto a la costa. de repente, una noche, Alana conocerá a un chico misterioso que le pide un café a medianoche. al marcharse, Alana descubre en la mesa una nota de este hombre cuyo nombre empieza por “R” según su firma. La vida hace que se vuelvan a encontrar, y el chico misterioso, Raúl, pasará de ser un completo desconocido a meterse poco a poco en el corazón de Alana. Raúl y Alana, sin quererlo, sufrirán un amor a primera vista. Pero ella tiene un pasado duro que aún no ha superado, problemas y traumas familiares. ¿Conseguirá Raúl hacer olvidar el pasado a Alana?

Un café a medianoche es una de esas novelas frescas, ligeras, y de fácil lectura que te enganchan desde la primera página. La he leído en mis vacaciones de semana santa, y no había rato más agradable que el que pasaba en el sofá leyendo esta novela. Ha sido un soplo de aire fresco y ternura.

Con respecto a los personajes principales, por un lado tenemos a Alana. Nuestra protagonista es una chica que no ha superado algunos traumas del pasado. Tras ver su sueño cumplido, el poder montar el bar, Alana lleva una vida de lo más tranquila en su pueblecito. Es un personaje que me ha parecido muy dulce, perfectamente definido y natural. Alana podría ser perfectamente cualquier mujer que conozcamos en la vida real. Me encanta leer a este tipo de personajes que conectan tanto con el lector.




En cuanto al protagonista masculino, Raúl, me ha encantado de principio a fin. Es un chico que enamora desde la primera vez que habla, atento, responsable y maduro. Raúl es arquitecto, pero ha decidido pasar una temporada con su hermano Héctor, en ese pequeño pueblecito. No os puedo contar mucho más de él, sólo que es un personaje entrañable y que os enamorará.

Tendremos personajes secundarios que serán partícipes en la novela y dinamizarán la historia. Por ejemplo, Candela, la mejor amiga y compañera de Alana. Héctor, el hermano de Raúl, la abuela de Alana y algunos familiares que aparecerán en algunos momentos puntuales.

La pluma de la autora ha sido una delicia leerla, sabe llevar perfectamente la historia de una forma que hace que se te pase la lectura volando. Ha utilizado un lenguaje sencillo y cercano. Una narración en la que podremos ver los sentimientos y pensamientos de ambos protagonistas.
Lo único que no me ha convencido de esta historia es el hecho de que creo que surge entre ellos la confianza demasiado pronto sin apenas conocerse al principio. Pero poco a poco se va fraguando una preciosa historia de amor.

La extensión del libro es ideal, consta de 191 páginas por lo que estamos ante una novela bastante ligera y que leerás en un suspiro. Los capítulos los he encontrado de una duración ideal que hace que disfrutes aún más de la lectura.



En conclusión,Un café a medianoche, es una novela romántica contemporánea, con una gran carga emotiva, tierna, donde encontraremos momentos duros del pasado, pero grandes dosis de amor. Un libro para leer en cualquier momento y disfrutar de un agradable tiempo de lectura.