Juliette: o Las prosperidades del vicio

Juliette o Las prosperidades del vicio es una novela que me ha sorprendido muchísimo, llegandome incluso a escandalizar en ocasiones. Sabía lo que iba a encontrarme: el vicio de la época en estado puro, violento y sádico, pero aún así es una novela que impacta mucho. En ocasiones, tienes que parar de leer a tomar un descanso, porque no puedes creer todo lo que estás leyendo.
El estilo del famoso marqués de Sade es lento y demasiado preciso, aún así he decir que pese al tema estrambótico capta la atención e incluso me atrevo a decir que engancha.
Todo comienza con Juliette y su dolor por la pérdida de su hermana. Claramente la protagonista no sabe gestionar su dolor y sus emociones y encuentra en el propio dolor carnal y macabro un extraño placer que la consuela. Si a eso le añadimos que es mal aconsejada por personajes de la época que la "llevan por un mal camino" o, mejor dicho, por uno peor del que ella misma llevaba en un principio, podemos llegar a entender por qué Juliette hace todo lo que hace. El libro, básicamente, es una exploración a la sexualidad más brutal. El libro es una crítica sin fin a la sociedad de la época también despiadada .
Lo más siniestro de la novela, sin duda, es la aparición de personajes reales de la época como el caníbal Minski, la princesa lesbiana Borghèse, la incestuosa Lady Clairwil o la envenenadora Durand.
¿Es una novela a recomendar? Yo diría más bien que es una novela que sigue un morbo, una curiosidad y se acerca a hablarte de temas de los que no habías oído hablar nunca (créeme, nunca ha leído nada así), pero no es una novela que yo recomendaría para pasar un buen rato de lectura.