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"Buonasera, princesa" es la tercera parte de la serie "En Roma". En este caso, como siempre hago con segundas o terceras partes, no os voy a contar de qué trata el libro. Solo voy a decir que nos cuenta la historia de Abril. Y aquí me quedo, porque dar más información es estropearos la magia del libro. Después de leer la primera y segunda parte de esta trilogía, la verdad es que me daba algo de respeto leer el final porque Abril no era un personaje que me entusiasmase demasiado, en comparación con Cloe y Marina; y porque las otras partes me habían encantado y ya iba, sin quererlo, con las expectativas un poquito altas. Pero para mi sorpresa me he encontrado con una historia que me ha encantado, enganchado y cautivado desde su inicio. En cuanto a los personajes, me ha gustado mucho seguir viviendo, de la mano de la tres amigas y el resto del grupo, su historia y su vida en Roma, cuidad que siempre será muy importante para mí. Pero, sin duda, lo que más me ha gustado es descubrir a Abril, ya que, como he dicho anteriormente, nunca me había llamado demasiado la atención. Abril es luz, es un personaje que brilla por sí misma; un personaje que, a pesar de haber pasado por una situación tan traumática, desprende vida, color y una bondad que no conoce límite. En serio, me ha encantado conocerla más profundamente. Por otro lado, la pluma de la autora, como he mencionado en sus anteriores libros, en una auténtica maravilla. Susana tiene algo que engancha; algo que hace que te metas tanto en la historia que, sin darte cuenta, te absorbe por completo. Sin duda, seguiré leyendo el resto de sus novelas. Por último, como única cosa negativa, creo que la historia ha discurrido un tanto deprisa para mi gusto y sí que es cierto que quizá disfruté un poquito más de la historia de Cloe y la de Maquina que, por cierto, es mi favorita. Pero esto es una mera cuestión personal. |
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