Arrivederci, amor

En "Arrivederci, amor" conoceremos a un grupo de tres amigas, Marina, Abril y Cloe, que abandonan durante cuatro meses su querida Barcelona para irse de Erasmus juntas a Roma. Pero este libro se centrará más en concreto en Cloe, una chica con TOC (Trastorno Obsesivo Compulsivo), y en cómo conocerá a su vecino, al caos en persona: Adriano.

Sé que cuento poco, sí, pero os quiero dejar igual que yo antes de entrar y conocer este libro: con la miel en los labios. Os aseguro que vale la pena saber lo mínimo.

Nos encontramos con una trama muy ligera, entretenida y eléctrica en la que viviremos junto a Cloe, Adriano y todos sus amigos, un sinfín de momentos inolvidables tanto para ellos como para los lectores. Ha sido apasionante conocer Roma de la mano de las chicas, sentir de nuevo qué es tener un amor efímero, de esos que se cuecen rápido pero de una muy buena forma, descubrir las incógnitas de la vida de Adriano, ser testigo de cómo el amor verdadero cambia a las personas... Una de las cosas que más me ha gustado ha sido ir viendo, en pequeñas cantidades, pequeños recuerdos de la infancia y adolescencia de los protas. Eso me ha permitido conocerles más bien. Diría que este libro contiene historias preciosas, divertidas y mágicas.

Ha sido un libro que me ha encantado, he disfrutado muchísimo, aunque como todos tiene algún pero. Por ejemplo, ha habido momentos en los que me ha parecido que había cositas demasiado juveniles para mi gusto; además, hay algo que me ha faltado, pero no sabría decir el qué...

Los personajes me han fascinado. Cloe es el orden en persona (dado el trastorno que sufre, a pesar de tenerlo controlado), organizada, risueña, con sus toques divertidos y una chica de lo más interesante bajo mi punto de vista. Y Adriano es el caos en persona, la desorganización y el desorden personificados (vaya, todo lo contrario a Cloe). También es un chico risueño, dicharachero y que se hace querer muchísimo. Apunte pequeño: me ha ENCANTADO la relación entre Adriano y su madre. Cloe y Adriano son dos polos opuestos, pero los de verdad; pero, como el ying y el yang, se complementan a la perfección. Tienen una conexión increíble desde el primer momento y, aunque al principio todo es atracción y curiosidad, acaban haciendo honor al nombre de la capital italiana y la dan la vuelta completamente. Me ha parecido que son eléctricos. Y me ha encantado.

Luego tenemos a Marina y Abril, las mejores amigas "para siempre de siempre" de Cloe. No os quiero hablar mucho de ellas porque tienen su propio libro, así que me limitaré a deciros que he empatizado mogollón con ellas y que quiero que sean mis amigas también. Por otro lado tenemos a Leonardo y Lucca, los dos amigos de nuestro Adriano, que son unos amores. Leonardo a mí me tiene enamorada; me pierden los chicos buenos. A lo largo del libro se conocen más personajes, pero no acabaría nunca si tuviera que nombrarles a todos.

La pluma de Susana es una maravilla. Nunca la había leído porque, sinceramente, sus anteriores libros no me llaman demasiado la atención. Pero este me ha fascinado, ya lo habéis visto. Tiene una pluma ligera y fresca que ha hecho que me beba el libro en menos de veinticuatro horas.

En resumen, "Arrivederci, amor" es un libro maravilloso sobre la amistad, los amores efímeros (o no tanto) y esas historias de amor que de verdad valen la pena; un libro lleno de personajes increíbles e historias inolvidables. Vais a sonreír con el corazón ablandado al máximo, a reír a carcajadas y soltar alguna que otra lagrimilla, y habrá valido muchísimo la pena. Lo recomiendo a todo amante del romance. Os va a encantar.