La complejidad de las pequeñas cosas en “Los últimos románticos” de Txani Rodríguez. Un viaje por la vida de Irune, una mujer de cuarenta años que no encaja con los prototipos de la sociedad, alguien escondida tras las muchas capas que vivir en un pueblo industrial y de clase obrera puede imponerte. Como parte de la margen izquierda trabajadora, con un padre que pasó su vida laboral en esa acería y como mujer casi en la cuarentena que tampoco acaba de encajar en los cánones establecidos, ha sido desasosegante y esperanzador viajar junto a Irune. |