Al teatro con Rodari: 264

Gianni Rodari, fue uno de los pedagogos y escritores infantiles más conocidos de su siglo. Inició su camino como periodista en un periódico local cuando el director de dicho periódico decidió crear una sección dominical para el público infantil. Debido a sus años como maestro, Rodari fue elegido y, desde entonces, su nombre está asociado intrínsecamente a la literatura dirigida a los más pequeños.

Gracias a él y a su incesante investigación sobre el arte de contar historias, los docentes y personal educativo han tenido, y tenemos, el gran privilegio de tener a nuestro alcance las mejores indicaciones para atraer y hacer disfrutar a los niños mediante la literatura.

"Al teatro con Rodari" es un libro en donde se recogen cinco obras teatrales en donde la comedia, la acción, el misterio, los enredos y la magia cobran especial protagonismo.

Combinando elementos del teatro clásico con el moderno, Rodari consigue, de un modo natural y estructurado, presentar una serie de historias divertidas que mantienen su esencia didáctica y llena de valores.

Antes del inicio de cualquier obra, se presenta una estructura simétrica en todo el volumen dando lugar a una recapitulación de los elementos más técnicos; sinopsis, presentación de los personajes, vestuario, escenografía, ambientación y atrezo.

El origen italiano del autor hace que algunas de sus obras posean un carácter cultural propio referente a su país. Es por ello, que algunos de los personajes protagonistas están relacionados con La Comedia del Arte. Esto permite ampliar el conocimiento de los niños y acercarles los estereotipos de personajes más destacados en este tipo de teatro.

Cada una de las obras permite ser representadas por un grupo de estudiantes y el autor así lo refleja en los consejos que aporta a lo largo de todo el libro para su puesta en escena.

Las historias son divertidas. Están llenas de situaciones absurdas y comentarios ingeniosos que amenizan la acción, suavizan las críticas sociales y potencian los mensajes que van implícitas en cada una de ellas, siendo reflejados en comportamientos y actitudes. Algún ejemplo de ello podría ser la importancia del esfuerzo, el paso del tiempo, el sentido de los días, la confianza en sí mismo, no ser demasiado confiado, etc.

El sello de Rodari está impreso en cada una de sus obras, tanto las de origen propio como en la única que se encuentra adaptada, "El traje del emperador". Su ingenio, su estilo poético y su sencillez sobresale en una maravillosa retórica que hace la delicia de quien lo lee.

A este título lo acompañan las bellísimas ilustraciones de David Sierra. Imágenes que plasman a la perfección el contenido del texto, ilustran su sentido o ejemplifican datos más técnicos.

Los dibujos son amables y delicados, se encuentran diseñados en tonos cálidos y pasteles. Los rostros de los personajes representan con exactitud sus estados de ánimo y facilitan la interpretación de un texto en donde solo se puede seguir los movimientos mediante diálogos o acotaciones.

Esta inclusión de arte es indispensable para este tipo de libros, ya que amenizan la lectura y la hacen más atractiva a todos los públicos.

Considero que "Al teatro con Rodari" es un excelente recurso para animar y acercar a los niños al mundo teatral, descubriéndoles el disfrute de la comunicación oral, de la expresión corporal, del movimiento, de la acción en grupo y de la cooperación y colaboración posibilitando el trabajo de algunas habilidades no cognitivas como la memoria o la percepción.

Del mismo modo facilita la práctica de inteligencias múltiples como la lingüística verbal, la intrapersonal o la kinestésica y el desarrollo de la inteligencia emocional.

Además, puede ser útil para explicar y trabajar de primera mano la estructura de un texto dramático y sus elementos aportando diferentes posibilidades de trabajo tanto individual como en grupo.

Es por ello que, recomiendo mucho este libro, especialmente en las escuelas, como medio de acercar a los niños a este género literario poco frecuente, ya que mediante el juego se les permite reflexionar, conocer y relacionarse de un modo muy didáctico y completamente divertido y estimulante.