Mutación

La ciencia ficción no es mi fuerte, al menos el cyberpunk, soy más de ciencia ficción basada en biotecnología o biología en general, por eso me interesó Mutación de Robin Cook, esta novel fue escrita en 1989, antes de que salieran a la luz los avances de ingeniería genética, y en especial antes de la clonación del primer mamífero, la famosa oveja Dolly, que nació en 1996 y pesar de que aún hoy está prohibido el uso de la tecnología de ingeniería genética para la manipulación de embriones humanos, nada garantiza que se respeten las convenciones, hay muchos intereses en juego, desde intereses personales como los de Victor y VJ (personajes de Robin Cook) hasta la de grandes transnacionales farmacéuticas o gobiernos.
Lo que más me asusta del planteamiento de Mutación es que parece muy racional el argumento de que la moral es solo una cuestión secundaria
Creo que nadie discute el valor de la ciencia, solo que y el conocimiento científico y la autoridad para la toma de decisiones deben estar unidos a través del comportamiento ético.
Tenemos por ejemplo el famoso proyecto genoma humano que permitirá mapear todo el genoma de los seres humanos e identificar defectos genéticos, y hasta corregirlos, pero volvemos al punto ético, el bien superior, las consecuencias son impredecibles por lo que los beneficios esperados deben ser mayor a los riesgos y el punto álgido es: quién toma la decisión de qué es correcto y qué no.
Robin Cook está catalogado como un mago de los thrillers médicos basados en ciencia ficción o en técnicas que aún no están generalizadas, lo que lleva a choque entre las ciencias biológicas y la ética.
El temor a lo impredecible de la manipulación está presente en la literatura y constantemente los autores nos recuerdan el riesgo que corremos persiguiendo una quimera o jugando ser dios, ya lo vimos en Parque Jurásico o Los Homúnculos, pero siempre queda la pregunta ¿Debemos renunciar a mejorar lo que pueda ser mejorado?