Nos encontramos con Lester y Meg, que tienen que ir a derrotar a Nerón (padrastro de Meg) y a Pitón, para poder salvar al mundo del caos y la perdición... Sabemos que Lester fue expulsado del Olimpo por Zeus, como castigo y porque era el único que podía cumplir esta misión. Junto a Nico di Ángelo (mi bebé, que ya no es tan bebé) y Will Solange (que brilla en la oscuridad), se encuentran en la travesía final, donde salir corriendo o morir, en el intento, no es una opción. En este último libro, nos encontramos con personajes mucho más maduros y capaces, Rick Riordan lo hizo otra vez, te mantiene cautivo hasta el último momento, pero yo esperaba más, mucho más. La historia y la trama esta perfecta, pero siento que falto algo, una chispa que se perdió en el camino, algo no me termino de cerrar y aunque ese final deja mucho que desear (en el buen sentido), yo quería una despedida de los siete, todos juntos, pero entiendo que cada uno siguió su camino y que juntarlos, era imposible. No estoy satisfecha, pero estoy conforme con el final, como siempre recomiendo, lean “Las crónicas del campamento mestizo” es un viaje de ida |