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El hambre, es con este tema o parte de él, que los más terribles acontecimientos tienen lugar en esta historia. Estamos en el año 1829 en algún lugar perdido del centro de Europa, un joven del cual ni siquiera sabemos su nombre, nos relata su vida y lo que acontecía cuando él cumplió 10 años y se convirtió en adulto. Viviendo en una pequeña aldea de cazadores, el invierno se acerca y es hora de salir de cacería para poder soportar los duros meses venideros, pero en esta oportunidad, les toca quedarse a cuidar el pueblo, una condena de muerte para los más pequeños. Y así, entre una narración fluida, con detalles que te erizan la piel, la crudeza del invierno y más aún la cruel forma de vida de estas personas, que nos van atrapando entre sus páginas. Cuando pensamos que las cosas no podían ser peor, nos sorprendemos ante una extraña leyenda de un Conde que cuida las tierras del norte. Un guiño quizás a cierto Conde que existió en realidad llamado Vlad Tepes, conocido por la forma de tortura más perversa y dolorosa. Una historia recomendada para una noche de tormenta y frío para sentir el ambiente en que se desarrolla. No hay mucho que pueda decir sin entrar en Spoiler, dado lo corto que es, pero realmente valió la pena leerlo. |
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