Me ha dado más de lo que esperaba. Creerme una infantilada con humor simple, tochamen a la moda y editado por Minotauro, no ayuda en absoluto. Resulta que me leo una historia que parece la mezcla ideal de Terry Pratchett, con su fantasía con situaciones y objetos actuales que utiliza para reírse de lo tonto que somos, a la vez que cuentos clásicos para ridiculizarlos. Y otro toque Monty Python. Humor absurdo y personajes esperpénticos. Sorprendente novela en un panorama peninsular que no deja de aumentar su calidad. |