El Oxford de Lyra

Se cumple 25 años desde la aparición en librerías de Northern Lights (Scholastic Point, 1995) y con ello, se cumplen un cuarto de siglo desde que iniciamos el viaje de Lyra Belacqua y Pantalaimon en búsqueda de algo más que una aventura junto a su tío Lord Asriel.

Lo cierto es que, desde la aparición de Luces del norte Pullman ha cosechado un éxito más que merecido dentro del público. El mundo de la materia Oscura es un mundo tan cercano y a la vez tan diferente al nuestro, que da pie para encontrar críticas a los dogmas más arraigados dentro de la cultura occidental sin necesidad de hacer mucho esfuerzo, y que le han valido más de un enemigo a Pullman gracias a los fanáticos religiosos —para sorpresa de nadie—. El mundo que ha creado Pullman es bastante atípico dentro del género pues mezcla de muy buena forma los elementos básicos del Fantasy tradicional y da sus aportes propios: un cimiento científico y teológico bastante fuerte, elementos que dificultan mucho el acto de tomar una decisión sobre si las obras de la materia Oscura son Fantasía y Ciencia ficción. Sobre este asunto, seguiré indagando maravillado por la obra de Pullman.

Es curioso como luego cosechar éxito editorial en determinada saga, los autores tienden a encasillarse y volver tan frecuentemente a estos parajes. Bien sea con el fin de atar algún cabo suelto de la trama principal, contar algún origen que cause cierta intriga o explorar el futuro dentro del mundo creado. Todos, motivos bastante válidos; pero no siempre bien logrados.

Es el caso del volumen en cuestión: El Oxford de Lyra un libro corto, pero lleno de detalles exquisitos que compensan su brevedad. Un libro que a la primera puede ser subestimado por su grosor, pero que dentro esconde piezas casi que de colección, pues como dice el mismo Pullman en la introducción del libro, es un libro que recoge los objetos curiosos que se pueden encontrar en cualquier cajón, de cualquier casa.

El libro como tal es ya de por sí una hermosa pieza: una edición bien cuidada con encuadernación en tela estampada y papel de alto gramaje para el texto. Adentro nos encontraremos con un cuento titulado Lyra y los pájaros, reproducciones de fragmentos del directorio de Oxford, un itinerario, postales y demás piezas curiosas. Todo esto viene acompañado de un bello mapa plegable y a todo color del Oxford donde habita Lyra, la cereza del pastel que es el libro.

La parte central como ya lo mencioné, es el cuento Lyra y los pájaros, una historia corta y sencilla que se desarrolla luego de los acontecimientos de la trilogía principal de la materia Oscura. La brevedad del relato no debe confundirse con superficialidad, pues en el relato se reconocen fácilmente los elementos principales y más elegantes de la trilogía. Acá Lyra y su compañero Pan van a vivir una "miniaventura" por las calles de la ciudad universitaria por excelencia, una aventura que tiene como hilo conductor la intriga de lo que está por suceder; un elemento que engancha de inmediato a la lectura.

En esta ocasión, y como el asunto más diferente al otro material de Pullman, en el quid de la historia va a estar presente una bruja del lejano norte que busca venganza de un viejo amor del pasado. Algo diferente a lo que sabemos de las brujas en la trilogía principal, pues allá queda bastante claro que son seres que conocen muy bien su bando y saben lo qué es malo y lo que es bueno; pero como en la vida no todo tiene que ser como se dice que es, y siempre hay alguna excepción a la regla.

Este corto regreso al mundo de las Luces del norte es ese pequeño trago que deleita sin empalagar y hecho a la justa medida para disfrutar lo que esconden las calles del Oxford de Lyra. Un relato que muestra que todavía quedan muchas cosas por descubrir de ese otro mundo similar al nuestro, pero con elementos particulares que enriquecen de una manera espléndida el gran tapíz que es La materia oscura.

Como este, existen otros dos relatos cortos: Once Upon a Time in the North (2008) y Serpentine, que pronto será publicado para conmemorar los 25 años del primer título. Ojala pronto, la editorial en español ponga sus ojos sobre ambos textos y le pierda el miedo a que a los más pequeños de casa se les hable de frente sobre religión y Ciencia, ayuden a ser más humanos libres, por favor.