Cartas de una pionera

Novela escrita en forma epistolar por Elinore Pruitt Steward, una mujer viuda con una hija pequeña que vive en Denver y decide abandonar su vida precaria y de explotación laboral para irse a las montañas de Wyoming en el Oeste americano, como colona en el año 1909.
A pesar de solo cursar estudios elementales se ve el dominio de la autora en la narración de las cartas que le envía a una antigua patrona, adquirido únicamente de su bagaje como lectora.
En las cartas muestra como es su vida de gobernanta en el rancho, cuales son sus labores, su relación con los vecinos, como es la dura climatología y la naturaleza que ve, además de algunas disparatadas aventuras que vive.
Son cartas que transmiten la ilusión y alegría de una mujer con un gran espíritu de superación e independecia.

-"CARTAS DE UNA PIONERA" de Elinor Pruitt Stewart-
"Sucede que cuando estás rodeada de tanta grandeza te das cuenta de lo insignificante que eres"
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Con esta maravillosa lectura, nos vamos al salvaje oeste americano, concretamente a las montañas de Wyoming, y con ella podemos disfrutar, como si de un diario se tratara, de las cartas que la autora le escribió a una antigua patrona, narrándole las andanzas de su nueva vida, cuando decidió establecerse como colona en estas tierras desconocidas.
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Si algo es destacable a lo largo de las páginas, es la propia Elinore, la autora y protagonista; una mujer viuda, con una hija pequeña, que con su escasa formación académica, pero amplia experiencia lectora, decide romper con su precaria vida en la ciudad, para vivir por su cuenta más en conexión con la naturaleza. Un espíritu libre de carácter aventurero y optimista, que junto a su fuerte tesón, la convierten en una persona, digna de admiración.
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Además "Cartas de una pionera" es un deleite para los sentidos, un canto a la vida como un conjunto de olores, sabores, sensaciones, emociones, descripciones, y experiencias, que dan valor a las pequeñas cosas, y que dan sentido a lo que es realmente la vida.
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Un testimonio muy especial y único de aquella época, que nos recuerda la esencia del ser humano, y que nos descubre a una pionera, adelantada a su tiempo, y abanderada de los derechos de la mujer, a pesar de que ella no llegará nunca a ser consciente de ello.

En esta ocasión nos encontramos una novela epistolar, es decir, un conjunto de cartas que una pionera de Wyoming de principios del siglo XX, llamada Elinore escribe a una antigua empleadora y que considera su amiga, donde le va relatando no solo su historia, donde se incluye con todo lujo de detalles todos los avatares a los que tiene que hacer frente en esa época, a mi me resulto interesante, dado que conoces como se vivía en aquella época, cual era el papel de la mujer, lo que significaba el sacrificio, la tierra. Las descripciones en ocasiones te trasladan a eso paisajes y pareces que puedes estar viéndolo con los ojos de la protagonista.

Esta es mi primera incursión en el Lejano Oeste y lo hago de la mano de Elinore Pruitt Stewart; una mujer que rompe con todos los estereotipos del vaquero norteamericano y que se ha ganado mi admiración.
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A principios del siglo XX fueron muchos los hombres y mujeres que decidieron dejar atrás una vida de privaciones en la ciudad para emigrar como colonos a las inexploradas tierras del oeste de Estados Unidos. Entre esas mujeres estaba Elinore Pruitt Stewart, una joven viuda con una niña de dos años, que marchó a Wyoming con la clara intención de forjarse un futuro mejor. En "Cartas de una pionera" encontramos el conjunto de misivas que Elinore remitió a la Señora Coney, su amiga y antigua patrona.
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Elinore carecía de formación académica, fue la lectura y su propia experiencia la que la convirtieron en una mujer sabia con una capacidad narrativa capaz de transportarte a los tiempos en los que los viajes a caballo podrían durar meses, en los que se dormía al raso y se charlaba al rededor de una hoguera. "Cartas de una pionera" es todo un canto a la vida y a la naturaleza. El amor de la autora por el paisaje que la rodea se palpa en cada una de sus descripciones; así como su pasión por la vida, su optimismo y su preocupación por los demás.
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"Cartas de una pionera" es, además de todo lo anterior, la crónica de una época en la que la generosidad, la solidaridad y el trabajo duro eran valores primordiales.
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He disfrutado muchísimo de esta lectura y me ha encantado conocer a Elinore; una mujer de carácter, toda una luchadora y una gran fuente de inspiración.
Y, como me he quedado con ganas de más, ya le he echado el ojo a "Cartas de una cazadora", la segunda parte de esta novela.

Elinore es una increíble mujer que, a principios del siglo XX, decide dejar todo atrás para empezar una nueva vida junto a su hija pequeña como colona en una nueva región: las montañas de Wyoming en pleno salvaje Oeste de los Estados Unidos. Primero como gobernanta en casa de un ranchero escocés y más tarde como hacendada de su propio rancho.
En este libro se plasman las cartas reales que Elinore fue enviando a lo largo de los años a una antigua patrona y amiga suya.

A través de estas cartas nos transportamos a las montañas nevadas que tan magníficamente describe, a viajes en trineos, comidas con forasteros, aventuras en los cañones, charlas nocturnas, acampadas al aire el libre acompañadas por los aullidos de los lobos y el ulular de los búhos...
También somos cómplices de la enorme solidaridad que se respira entre vecinos, los cuales aún teniendo poco siempre están dispuestos para echar una mano a aquel que lo necesita.

Elinore es fuerte, valiente, optimista, no se deja someter por nadie, está llena de bondad y tiene un carisma brutal. Siempre dispuesta para ayudar y con unas ganas enormes de aventuras. Si no las encuentra ella misma se las busca.
La señora O'Shaughnessy también me ha parecido una mujer entrañable, con un carácter enorme pero de muy buen corazón. Igual te cose un vestido que te amputa un dedo si lo necesitas. Así es ella. Maravillosa.

En tiempos en los que no está permitido viajar, este libro es un gran soplo de aire fresco. Todas las cartas transmiten un optimismo y una pasión por la vida altamente contagiosa.
Elinore se va a quedar conmigo para siempre ♥️
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Nos situamos a principios del siglo XX, Elinore (que no es un personaje ficticio, sino una mujer real) tras perder a su marido y quedar viuda, decide abandonar Denver y mudarse junto a su hija pequeña a las montañas de Wyoming, en el Oeste americano. En estas tierras primero trabajará de gobernanta de un ranchero, luego se animará a crear y sacar adelante su propia hacienda. A través de cartas Elinore le cuenta a su antigua patrona, la señora Coney, sus vivencias y todo lo que le está aconteciendo en su nueva vida, y son esas cartas, las reales, las que conforman este libro y de las que nos empapamos los lectores.

Gracias a sus escritos —altamente descriptivos, ingeniosos y con un humor e ironía muy agradables— nos desplazamos de lleno al ambiente en el que vive; nos acerca a las personas de diferente índole que conoce y que se convierten en sus nuevos vecinos; somos partícipes de sus escapadas y aventuras, de las costumbres y fiestas, de las alegrías y las penas. Sus cartas muestran ese mundo al que ahora pertenece, un mundo en el que son pocos, aislados casi, pero donde todos se comportan como una especie de piña.

Elinore siempre tiene muchas cosas que contar, y yo, a día de hoy lectora de sus cartas, le agradezco que entre en detalle y con un estilo que no me ha resultado aburrido en ningún momento, tiene un don narrativo aun sin tener formación académica. le gustaba leer y en sus escritos deja diversas referencias literarias.

Me ha gustado mucho conocer a esta mujer valiente y carismática, por ello recomiendo estas #Cartasdeunapionera. Seguro que te harán pasar un buen rato, sumado a lo interesante que puede resultar conocer este tipo de vidas que inspiran y que pueden dar fuerza y motivación a la nuestra. ☺️✨

¡Más sobre esta lectura en el blog!
Enlace: https://lectoraempedernida88..

Esta recopilación de cartas se publicó en 1914 y a través de sus páginas conocemos la historia de Elinore Pruitt Stewart desde que decidió mudarse al oeste unos años antes para convertirse en terrateniente.

Las cartas que Elinore manda a su antigua patrona enganchan desde la primera línea porque tienen un encanto especial. A través de las misivas conoceremos las duras tareas de esta mujer y nos transportaremos a los impresionantes paisajes que le rodean. Viviremos cambios de estaciones, pasaremos penurias en plena naturaleza y nos confortará la compañía de los entrañables vecinos de nuestra corresponsal.

Es el primer libro de literatura de la frontera que leo y sin duda no será el último porque me ha encantado. Leeré ‘Cartas de una cazadora' (1915) también editado por Hoja de Lata y estaré encantada de leer vuestras recomendaciones sobre este género.

MARAVILLA (5/5)
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Y ello a pesar de que a mi ejemplar le faltan páginas 😓, por algún error de imprenta, y no empieza con normalidad hasta la página 34. Con la carta IV.
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Principios del S. XX. 1909 (año de la primera carta que aparece en mi libro).

🗯Elinore, sola y con una hija pequeña, decide dar un giro de 360° a su vida y, a los 33 años, se muda desde Denver hasta Wyoming.
Allí comienza a trabajar como ama de llaves de un granjero, Clyde Stewart, con el que acabará casándose y teniendo 3 hijos más (aunque el primogénito falleció).

La fascinante vida de Elinore quedó inmortalizada gracias a las regulares cartas que le escribía a su antigua empleadora, y amiga, de Denver.

El libro trae 23 cartas originales enviadas por Elinore, en las que narra, con mucho ingenio y humor, su vida como colona en una tierra desconocida y deshabitada.

Cartas bien escritas, pese a los pocos estudios que tenía, y en las que narraba su día a día. Cómo cultivaban la tierra y se alimentaban. La buena relación con sus «vecinos» (otros colonos; y entre sus casas había bastante distancia) y cómo se ayudaban en todo. Sobre amor, hijos, embarazos, casamientos, religión (habla también de los mormones), …
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¿Qué encontraréis en este libro? La historia de una mujer maravillosa. Elinore merece ser leída. Conocida. Disfrutada.
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Erratas encontradas: 10 {🤦🏻‍♀️ ¡psicoanalista ven a mí!}
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FRASES SUBRAYADAS:
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«[…] lo cual confirma lo que siempre he dicho, que soy una mujer sumamente afortunada por encontrarme con gente encantadora de verdad y por tener experiencias realmente positivas. Siempre me pasan cosas buenas».
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«¡Pobre muchacho! al darse cuenta de que su muerte estaba próxima, todos sus pensamientos fueron para su madre».
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«Dice que le gustan las palabras poco comunes, pues dan distinción a la conversación».
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«[…] bienaventurados son quienes no esperan nada, pues así no se decepcionan».
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«No hay nada más cierto que es mayor bendición dar que recibir».
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«[…] a mí lo único que me preocupan son los batallones de mujeres cansadas, preocupadas, a veces con frío y con hambre, muertas de miedo de perder sus trabajos, que podrían disponer de comida a montones y de buenas hogueras con solo recoger leña y de casas acogedoras de su propiedad si tuvieran el coraje y la voluntad de conseguirlo».
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«[…] los tontos entran donde los ángeles no osan».
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Lectura para 8 de los #24retosdelectura:
9.- Con pareja en la portada
11.- de autora nacida en el S. XIX
12.- Obra epistolar (real o ficticia)
15.- Donde el/la protagonista va de viaje
16.- Publicado originalmente por entregas
17.- Libro que tengas desde el año pasado
21.- Libro de una editorial fundada en el S. XXI
22.- Donde haya al menos un nacimiento y una muerte
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#LeoYComparto #bookish #DimeUnLibro #bookaholic #booklover #instalibros #bookworm #bookstagram #Debolsillo #EditorialHojaDeLata #HojaDeLataEditorial #LettersOfAWomanHomesteader
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#Libros / para #blogloqueleo / #CartasDeUnaPionera @hojadelata_editorial #ElinorePruittStewart / Traducción: #RosanaHerreroMartín
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#HastaElTotoDelCoronavirus

No tengo palabras para describir lo que he disfrutado leyendo este libro. Me ha resultado delicioso.
Las cartas escritas por Elinore hace tantos años, te trasladan a una época perdida, a una forma de vida en contacto con la naturaleza, de solidaridad entre vecinos y de amistades para toda la vida.
Y también transmiten fuerza y vivacidad. Fuerza de una mujer que escapó de los estereotipos de su época, y que decidió tomar las riendas de su vida e irse a una nueva tierra para empezar de nuevo con su hija y con su propia hacienda.
Vivacidad al leer como no tenía ningún problema en irse a la montaña para acampar bajo las estrellas y disfrutar de la naturaleza, o recorrer millas para ayudar a una familia necesitada.
Creo que seguiré con el siguiente libro de cartas, para poder disfrutar de sus experiencias en medio de las montañas de Wyoming

Fragmentos de la vida de una mujer valiente y decidida que convertía en luz todo lo que estaba a su alcance.
Elionore Pruitt Stewart narra su apasionante aventura cuando decidió dejarlo todo y construir su hogar en las agrestes y hostiles montañas de Wyoming, en pleno corazón del Oeste americano. Con un estilo fresco, cercano y muy natural, ha conseguido contagiarme su espontaneidad, su sentido del humor y su filosofía de vida. A través de las cartas que escribe a su antigua patrona, nos hace partícipes de un sinfín de anécdotas que reflejan su gran personalidad y cómo transcurre su día a día en compañía de sus vecinos. Me ha parecido realmente increíble su manera de retratar las historias de algunos de ellos y su forma de transmitir sus penas y desgracias con un tono desenfadado y a la vez, tan íntimo y profundo.
Elionore aprendió a cazar, a plantar tomates verdes, a montar a Chub, su inseparable compañero de viaje y a recorrer en trineo los cañones nevados y otros parajes majestuosos, bellos (y peligrosos), en los que la fuerza de la naturaleza se funde con la propia fuerza interior de esta mujer inolvidable. Elionore conseguía iluminar a las personas más tristes y sombrías, lanzándose siempre a ayudar y transformando sus vidas centrándose en los pequeños detalles y dejando siempre a un lado las dificultades y obstáculos.
Pero lo más importante que aprendió Elionore y que enseña esta lectura, es a valorar las cosas más sencillas y aparentemente insignificantes (como comer frijoles enlatados al calor de una fogata, sobre la arena de las montañas rocosas de Wyoming), a buscar siempre el lado positivo, dejar atrás todo lo que nos produce dolor y seguir hacia delante siempre con una sonrisa, porque yo, como Elionore, “creo firmemente en la risa”.
Esta lectura me ha hecho reír y llorar, me ha encogido el corazón y me ha enseñado la importancia de la solidaridad y la generosidad entre personas que lo único que podían compartir era amor y esperanza. Elionore me ha recordado que “la fortaleza y el conocimiento” vienen con la práctica, y que en la vida hay que “experimentar, trabajar y demostrar cosas”. Tengo la sensación de que estas cartas han encontrado hueco en mi interior y que su autora se quedará conmigo para siempre.