Y Julia retó a los dioses

En esta continuación de Yo Julia,  vemos a una Julia que ha logrado su primer objetivo Severo es el indiscutible Emperador de Roma. Pero este hecho no significa ni la paz ni tranquilidad para esta mujer que ahora enfrenta nuevos enemigos los que se encuentran en el Senado,  y peor aún dentro de su familia y personas más cercanas a su esposo
El libro nos ofrece un relato sin tregua de la lucha de Julia por preservar el poder y dar cimiento y origen a una dinastía,  así que tenemos a esta mujer,  inteligente,  pragmática y con una tremenda visión de Estado y una innegable capacidad de adelantarse a los hechos y movimientos de sus enemigos. Pero también a una mujer que no supo intuir a tiempo que el mayor obstáculo para sus planes estaba en la figura de sus hijos.
Posteguillo nos entrega una natación vibrante, que nos muestra no solo la vida de Julia,  si no que un retrato complejo de las luchas por el poder en el Imperio romano, y a la vez loa cambios político históricos que este fue sufriendo a través de los años.
En la novela encontramos nuevos personajes,  pero también nos reencontramos con algunos del primer libro,  como Lucía,  Caledio y por supuesto Galeno,  quien una vez más es mostrado como un testigo preferencial de los avatares y disputas por el poder dentro de Roma.
Posteguillo agregó esta vez un nuevo elemento al convertir en personajes de su libro a los dioses romanos, me parece un toque acertado