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Una vez terminada la saga, las sensaciones son muy buenas, y con eso me quedo. La historia global de los 4 libros es de las mejores que he leído. El protagonista, Robinette Broadhead, es un gran personaje que a pesar de sus miedos, inseguridades y sentimientos de culpa sigue adelante y hace lo que debe hacer. La mezcla de ciencia y ciencia ficción se encarna perfectamente en el programa informático "Albert Einstein" que acompaña a Robin a lo largo de los libros. Que consiga explicar el Big Bang, el espacio de diez dimensiones o la historia del Universo de una forma amena y sin perder ritmo en la narración es de valorar. Si concretamos en este cuarto libro, Pohl introduce algún hilo argumental que si desapareciera no afectaría en nada a la historia, pero son casos puntuales y, en general, consigue dar respuesta de forma satisfactoria a las grandes preguntas que se plantean desde Pórtico. Una gran saga. |
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