Morir no es lo que más duele

Es un libro que el principio es muy bueno, promete mucho pero conforme vas leyendo, se va llenando de hechos inverosímiles, se va liando la perdíz de una manera impresionante en la que luego es difícil que la autora pueda salir bien y sea creible.
El libro está lleno de frases repetitivas, personajes que cuentan lo ocurrido y líneas más abajo, otro personaje las vuelve a contar. Se me ha hecho tedioso.
Los personajes hablan de forma antinatural, me ha recordado en ocasiones a una obra teatral antigua, muchas florituras....
Tiene bastante paja, opino que si un personaje tiene que contar algo de su vida, que sea para comprender mejor la personalidad del mismo, no para rellenar páginas y que no tengan nada que ver con el caso del libro, pues aqui pasa constantemente.
En la investigación, un personaje en concreto, un testigo no recordaba nada de algo pasado veinte año atrás y de pronto recuerda exactamente todo o.O
Demasiadas coincidencias para hacer creíble la historia.
El final ha sido lo peor de todo....sin comentarios.
Lo recomiendo? No, pero para gustos, los colores