Una super sandía: 27 historias de letras: 1

Pablo Picyk, ilustrador y diseñador gráfico argentino, tiene una amplia trayectoria como profesional, apareciendo sus dibujos en diarios, libros, revistas, televisión, etc. Desde niño ha creado y construido sus propias historias y en este volumen desea plasmar una idea original en la que las letras son las protagonistas.

“Una super sandía. 27 historias de letras” es un divertido libro para aprender y disfrutar jugando con el abecedario.

Las historias de las letras son breves. Compuestas por oraciones sencillas, divertidas y alegres, tipografía mayúscula, y formadas por un máximo de cuatro palabras facilitará al pequeño lector la iniciación en la construcción de oraciones sencillas y la identificación de los componentes de las mismas.

A través de sus imágenes ricas en colorido e inspiradas, aparentemente, en obras clásicas de Picasso o Kandinsky y movimientos artísticos como el arte abstracto, el cubismo o el surrealismo, el autor pone de manifiesto un juego de líneas divertidas que representan, de manera alocada, llamativa y alegre, el texto al que acompaña, además de crear una dinámica de búsqueda de la imagen puesto que al dibujo se le incorpora elementos que empiezan por la misma letra trabajada.

Un ejemplo podría ser la letra “E”. “Un elefante equilibrista”. En la imagen aparecerá el elefante manteniendo el equilibro sobre una cuerda, pero además aparecerá la escalera por la que ha subido, irá acompañado de un escorpión y de fondo se verán estrellas. Esto ayudará a la estimulación visual del niño y a la comprensión lectora.

Es ideal como recurso y apoyo para la enseñanza de las letras, bien sea desde casa o en la biblioteca de aula, personalmente recomendaría que el libro fuese guiado por un adulto para sacar el máximo provecho del mismo, puesto que en tan pocas páginas ofrece la oportunidad de poner en práctica numerosas actividades y juegos con las palabras, ampliar vocabulario, contar y buscar letras y/o componer oraciones sencillas. Así mismo se estimulará tanto visualmente (colorido, imágenes, etc.) como auditivamente a través de la discriminación y la agudeza sonora, dado que las palabras que integran las frases son eufónicas (que suenan agradable) y sus fonemas similares.

Sin duda alguna lo recomiendo por ser un libro llamativo y divertido con el que disfrutar del lenguaje con los más pequeños de forma que mediante el juego se le ayude a desarrollar su aprendizaje.