Misión espacio

En este libro de Luca Perri, astrofísico italiano de la Agencia Espacial Europea, se nos lleva a hacer un recorrido por la historia de las misiones espaciales gubernamentales de las dos potencias mundiales, y un poco de la ingeniería aeroespacial por consiguiente, que surgieron después del término de la Segunda Guerra Mundial: Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas(U.R.S.S.) ,comúnmente conocida como Unión Soviética, (conocida por Rusia por los españoles), y los Estados Unidos de América (USA – EE. UU.)
En sus páginas podemos ver como en los primeros años de investigación, aunque los americanos comandaron la carrera espacial al conseguir mandar al espacio los primeros seres vivos, las moscas del vinagre porque tienen el 75% de las enfermedades que puede desarrollar el ser humano y comparten un gran porcentaje de genoma. Además, estos insectos fueron elegidos por su pequeño tamaño y peso ya que el kilo de peso material que se envía al espacio vale varios miles de euros/dólares o cualquier otra unidad monetaria. Fueron los soviéticos quienes en verdad consiguieron desarrollar mejores vehículos y habitáculos, además de poner en órbita al primer ser vivo, la perrita Laika, y al primer hombre, Yuri Gagarin. Sin embargo, al final el primer ser humano en poner los pies en la superficie de la Luna fue un americano, Neil A. Armstrong.
Repasada esta historia, se centra en las anécdotas que protagonizaron algunas de las misiones, que a la postre con sus fallos pusieron sobre aviso a los ingenieros para mejorar tanto las medidas de seguridad como otros instrumentos necesarios para la habitabilidad de las naves aeroespaciales durante un espacio prolongado de tiempo. Dentro de estas anécdotas hay algunas muy escatológicas, pero a la vez divertidas puesto que terminaron de manera feliz y nos cuenta de manera amena como comen o hacen sus necesidades básicas los astronautas, cosmonautas, etc. Y a la vez son la mejor enseñanza para ver que de un gran fracaso se pueden sacar conclusiones positivas y que nos ayudan siempre a mejorar.
Por último, nos deja varias de las frases más célebres de la carrera espacial, siendo reseñable, aparte de la híper conocida de Armstrong, una pronunciada por Gagarin que el gobierno soviético silenció en su época: “Desde aquí arriba la Tierra es hermosa, sin fronteras ni confines”, pero sin embargo si dio publicidad a otra donde dijo “La Tierra es azul. Qué maravilla. Es increíble.”
Así que si os interesa el tema de la astronáutica, especialmente su historia pero no queréis un manual intensivo y muy denso, este es vuestro libro. Ameno, divertido y aunque dirigido esencialmente a jóvenes, también puede ser disfrutado por los adultos.

Es el primer libro de Luca Perri, astrofísico italiano de la Agencia Espacial Europea, que leo y me ha encantado.
Nos lleva a hacer un recorrido por la historia de las misiones espaciales, y de los avances en la ingeniería aeroespacial por consiguiente.
En sus páginas podemos ver como resumiendo esta historia, se centra en las anécdotas que protagonizaron algunas de las misiones, tanto buenas como malas, pero sobre todo se centra en curiosidades que cuenta de manera amena referentes a las necesidades básicas los astronautas, cosmonautas, etc.
Además reseña varias de las frases más célebres de la carrera espacial, que muchos ya conocemos, pero para los más jóvenes pueden ser un gran referente ya que es a ellos a quienes va dirigido, pero como me ha pasado a mi los adultos también podemos disfrutarlo.
Que la historia se relate en capítulos de manera simple, corta duración buena letra y acompañada de imágenes, ya sean tipo comic, o explicativas hacen que el libro pueda ser disfrutado también por un perfil más juvenil, aunque a priori no les atraiga el tema, seguro que al final les fascina.

"Misión espacio" es un libro de divulgación científica para todos los públicos... bueno, por lo menos, para adolescentes en adelante.
Su autor, Luca Perri, es un astrofísico italiano que soñaba con ser astronauta, hasta que la realidad le hizo ver que quizás sus esfuerzos podían ser útiles en otro campo no tan "físico".
Y es que la profesión de astronauta, que todos tenemos tan idealizada, es mucho más complicada de lo que pensamos y quizás un 40% de los primeros viajes espaciales dependieron demasiado de la buena suerte y de los pobre animalitos.
Pero la ciencia es eso, es fallo y error... y muchos millones de dólares y rublos.
La lectura se me ha hecho muy amena, el lenguaje utilizado es muy accesible y la forma de expresarse del autor me ha encantado. No han faltado las comparaciones frikis, las historias escatológicas (y de esas ha habido muchas) súper curiosas, olorosas y divertidas.
Es un libro que recomendaré sin duda!