El italiano

El placer de hablar sobre una de las obras de Pérez-Reverte es traer del pasado tantos recuerdos a mi mente, volver al tiempo cuando me lancé a esta aventura de navegar en el mundo de la literatura. Y no es para menos, porque mi primer libro al iniciar “Los perros duros no bailan”, marcó un antes y un después en mi vida.

Hoy con orgullo traigo esta novela, escrita magistralmente con un conjunto de hechos históricos, cargada de acción, aventura, amor y mar, en plena Segunda guerra mundial, donde a partir de los sucesos ocurridos en Gibraltar, un cuerpo élite de buzos militares Italianos (Decima Flottiglia MAS), lograban infiltrarse en los puertos británicos del Mediterráneo, cuya función era la de atacar y sabotear buques enemigos, con torpedos tripulados por humanos en una operación casi suicida, pero con honor y ferocidad única.

La historia cuenta como uno de estos militares Italianos (Teseo Lombardo), que luego de haber fallado su misión y quedar casi muerto, llega hasta una playa con pocos signos vitales. Allí es encontrado y recogido por una viuda española (Elena), quien a pesar de ser del país enemigo, se encarga de cuidarlo, y aquí en adelante comienza una aventura amorosa entre ambos.

Elena, una mujer templada, que guarda en ella secretos que nunca serán revelados, nos muestra de que está hecha, cuando le toca vivir la experiencia de estar involucrada, en sabotajes, espionajes y otros gajes de la guerra.

Una de las cosas que más resaltan en esta novela, es que a pesar de diferentes ideologías, y países, la valentía con la que se desenvuelve Teseo El Italiano, y que a pesar de saber que le depara el futuro, se muestra como el mejor, no siendo un héroe, sino, un soldado orgulloso de su país, que cumple con su deber.

Con alegría, les recomiendo esta hermosa y evocativa novela de acción, en tiempos de guerra.

- Memento audere Semper “recuerda atreverte siempre”