Una maravillosa historia de seres peculiares pero llenos de amor. Se dan pinceladas de cada uno de los miembros de esta familia, se nos cuentan sus inquietudes, sus cualidades y sus miedos. Hay un árbol genealógico para que situemos a cada uno de ellos. Y, como se dice, a veces, los monstruos son los otros. Las ilustraciones de Lacombe, con tintes de fotografías sepias, son, como siempre, preciosas y evocadoras. |