Mafalda una niña de 9 años a la que le quedan unos 6 meses para perder la visión completamente debido a la enfermedad de Stargardt. La autora se inspira en su propia enfermedad para escribir un libro lleno de sensibilidad, ternura y valentía. Una historia sencilla y breve pero con un mensaje de ejemplo y superación muy potente. Cuesta imaginar el terror que debe suponer perder la visión y más en la infancia así como la dificultad de conseguir herramientas mentales adecuadas para superarlo. Me ha gustado mucho la referencia literarias a otras novelas como el principito o el barón rampante. Como única pega destacaría que me ha parecido el personaje de Mafalda demasiado cándido e inocente para una niña de 9 años. En resumen un libro que te hará llorar, valorar más el día a día, relativizar los problemas y las carencias del día a día. No soy de leer historias tristes pero esta merece la pena. |