Insomnio

Me gustan los relatos, es un género muy fácil de leer, no tan fácil de escribir, se trata de condensar en unas páginas toda una historia, algunos pecan de exceso, otros por defecto. Algunos cierran otros dejan abierto el final, cada uno es un mundo. Los que incluye este libro, podría decir que dan en lo justo, tienen la justa medida, y son cerrados. Así que tenemos cuatro relatos, uno de ellos diría que es una novela corta, todos tienen en común una pizca de fantasía, y bastante intriga.

Comenzamos con El cine, en este tenemos a una pareja de novios en la que a ella le hace mucha ilusión llevarlo a él al cine, pero a él no le hace ni pizca de gracia. Comienza la película y él sale en estampida, no podemos imaginar por qué. al momento aparecemos a miles de kilómetros, en un viaje turístico a Ucrania de dos parejas que no lo son, pero no les importaría serlo. Un buen destino a su entender podría ser la ciudad de Prypiat, la principal afectada por la explosión de Chernobyl. Parece que ahora está de moda ir a un lugar lleno de radiactividad. Me faltaba haber visto la serie, para que mi estómago estuviese encogido durante todo el paseo. al final…pues eso. Averiguadlo.

En el segundo, Insomnio, el que le da nombre a la novela, y que en realidad es una novela corta, dividida en dos partes, nos encontramos a un escritor, Jan, que no puede dormir, el insomnio se ha instalado en sus noches y no puede con su alma, algo que va a ir afectándolo cada vez más negativamente en su trabajo en el periódico. La desesperación lo hace ir en busca de un amigo que tiene una extraña habilidad para manejar todo tipo de sustancias. le da a probar una que está en fase experimental, se llama el Sueño Azul, y realmente permite dormir, le va a hacer efecto, pero tiene unos pequeños efectos secundarios, nada, unas tonterías mínimas que lo van a dejar bastante desconcertado…como a mí. Su segunda parte es bastante más sorprendente, en ella hace unos cuantos guiños a sus anteriores relatos y a mí se me instaló en el hombro el señor Scrooge, y no se bajó de ahí, a pesar de mi viaje a la India.

En vacaciones en el infierno, vamos a tener eso, unas vacaciones pagadas a Vietnam, a la selva verde, húmeda y pastosa, una guerra cruel y sanguinaria en la que tres soldados van a verse marcados a fuego por su estancia allí, también hay sorpresa, así como una gran dosis de inteligencia y resistencia.

Para cerrar el libro vamos a La casita de piedra sobre la colina, ahora el viaje es a la campiña inglesa en el siglo XIX, una chica casadera se enamora de un pobre maestro, algo que su familia no está dispuesta a tolerar, la única solución es huir juntos, aunque eso puede no resultar tan fácil. Es el más tierno y…¿actual? Deja un dulce regusto con el que terminar la lectura.
Los temas que van a enseñorearse entre sus páginas van a ser la duda, el miedo, la culpa, los remordimientos, la amistad y el amor. La cantidad de esos sentimientos va a ir fluctuando según el relato, pero en todos ellos va a estar presente.
Un libro de relatos bien contados, bien presentados y con una alta dosis de sorpresa, que cada uno en su línea, te van a fascinar. Por supuesto que lo recomiendo sin dudar. A veces, el insomnio merece la pena.
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