Vías cruzadas

Opinión personal:
Cuando vi esta publicación entre las novedades de la Editorial Duomo, y me enteré de que James Patterson es el escritor más prolífico y de mayor éxito en el mundo, tuve una corazonada y me dije que la tenía que leer sí o sí. Máxime después de haber indagado en su biografía y descubrir que la película de "El coleccionista de amantes" (largometraje que me gustó mucho) está basada en una de las novelas que forma parte de la extensa serie en la que el protagonista absoluto es el investigador Alex Cross. La verdad es que acerté con la corazonada y hoy os traigo esta reseña de un libro que he devorado.
Alex Cross es un ex agente de la Unidad de Ciencias del Comportamiento del FBI, que actualmente trabaja como detective de la policía metropolitana de Washington D.C. Alex se dirige a Starksville, Carolina del Norte, el pueblo que le vio nacer y donde pasó parte de su infancia, acompañado de su esposa Bree, sus dos hijos y su nonagenaria abuela. Vuelve allí después de 35 años, con miedo a enfrentarse a los fantasmas del pasado, y negándose a desbloquear los mecanismos de protección creados por él mismo para evitar enfrentarse a ellos. Secretos olvidados mucho tiempo atrás y relacionados con la muerte de sus padres.
La familia ha regresado y se quedará en el pueblo el tiempo que dure el juicio de su primo Stefan, un profesor de gimnasia que ha sido acusado de torturar y matar salvajemente a un muchacho de 13 años al que daba clases y con el que tenía una estrecha amistad. Stefan tiene todas las pruebas en su contra, de ahí que su abogada Naomi, que resulta ser la sobrina de nuestro protagonista, solicitara la ayuda de Alex Cross. El acusado quiere que el detective aborde el caso sin ideas preconcebidas, por lo que no le contará su versión de los hechos y Alex deberá comenzar la investigación desde cero, asegurándose de dar con el verdadero culpable que pague por las cosas horribles que le hicieron al pequeño. Pero la verdad es que lo va a tener complicado a causa de los extraños giros que dará el caso a los pocos días de llegar Alex al pueblo.
El seguimiento de varias pistas trasladarán a Alex hasta la ciudad de Florida, donde ayudará a la policía local con un caso harto complicado en el que un ladrón y asesino en serie, con mucho glamur, está actuando en las mansiones de Palm Beach, sembrando el terror entre las clases más pudientes de la sociedad. El lector conoce desde el primer momento su nombre: Coco, y descubrirá que tiene ciertos gustos poco acordes con su sexo.
Vías cruzadas está narrada con una prosa sencilla y directa, y su trama es lineal cronológicamente. La mayor parte de la narración está hecha en primera persona por el propio Alex Cross, a excepción de algunos capítulos en los que él no se encuentra presente y cuyo narrador es omnisciente. Estos capítulos están relacionados con el caso del asesino de Florida y con otro personaje siniestro que es el que lleva los tejemanejes de la corrupción que impera en el pueblo de Starksville.
Vías cruzadas es una novela de 490 páginas, que se dividen en 102 capítulos de muy corta extensión y con abundancia de diálogos, lo que le aporta agilidad y frescura a la historia, incitando al lector a adentrarse en una historia que cada vez se torna más complicada. Cuando digo de ritmo ágil, quiero decir que literalmente no podía parar de leer porque necesitaba saber qué estaba pasando y cómo terminaba todo. Yo la he devorado en apenas cuatro días
La novela tiene multitud de personajes, por lo que es imposible que estén todos bien descritos y la mayoría me han parecido algo planos. Destacar el de su personaje principal, perfectamente definido y que se aleja del estereotipo de los detectives americanos a los que estamos acostumbrados en este género literario. El autor no deja de plantear dudas para que el lector reconsidere una y otra vez sus sospechas.
En resumen, Vías cruzadas es un thriller de suspense, que contiene diversas tramas que se entrecruzarán a lo largo de todo el libro y que desembocarán en un final sorprendente y totalmente impredecible. Una historia que parece un rompecabezas cuyas piezas no encajan, llena de secretos, de giros inesperados y de pistas falsas, que nos adentrará en varias subtramas sociales y personales que harán patente el racismo que aún impera hoy en día.

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Nunca había leído al autor, y en la segunda parte del libro me puse a investigar sobre él, dado que hace referencia a otros casos anteriores resueltos. ¡Tiene infinidad de obras! Y sólo de Alex Cross hay como unas treinta. ¡Pero tranquilos! Se pueden leer igual sin haber leído los anteriores.
Al principio me costó un poco la lectura, porque no entendía algunas páginas, que al desarrollarse la historia un poquito más, comprendí y me atrapó al punto de no poder soltarlo.
Me sorprendió muchísimo éste libro. Todo lo que creía que iba a pasar, no sólo no pasó, sino que además que autor me descolocó veinte veces más.
Un final absolutamente inesperado. Los últimos capítulos los grité con muchos “¡¿QUEEEEE?!” Y “¡NO PUEDE SEEEER!”. Me encantó.
Definitivamente es un autor que espero poder seguir leyendo.

💖 A Vías Cruzadas voy a ponerle un ♡♡♡♡ 4/5.
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Voy a empezar hablando de su estructura, y es que me ha gustado mucho. Los capítulos son terriblemente cortos, de apenas dos páginas, de estos que se leen sin darte cuenta y van motivándote a seguir 'solo un poco más' hasta que sin darte cuenta has devorado medio libro.
Por otra parte, la acción transcurre en diferentes escenarios y es por eso que en ocasiones, al inicio del capítulo, nos marcarán en qué ciudad nos encontramos para avisar de un salto en la trama. ¡¡Y puede ser muy valioso!! al principio yo no prestaba atención a esos detalles pero más tarde me di cuenta de que podían ser importantes, algún tipo de pista sobre la conexión entre unos personajes y otros. Así que si tenéis la suerte de no haber leído aún la novela y pretendéis hacerlo... prestad atención a cada mínimo detalle: No están ahí por casualidad.

Dicho esto pasemos al elenco de personajes, que no son pocos.
Aunque el protagonista indiscutible sea Álex Cross, es de imaginar que no trabajará solo ni caerá sobre sus hombros todo el peso de la trama. Álex va a viajar con su familia para intentar demostrar la inocencia de su primo Stefan, y ésto genera numerosas escenas alejadas del caso en las que conoceremos un poco mejor a la familia y sus vínculos. Por si fuera poco, a la amplia familia se suman los inspectores de cada respectiva ciudad, los sospechosos, los familiares de la víctima... así que si disfrutas intentando cazar al asesino antes de que el autor deje todas las pistas sobre la mesa, te recomiendo pillar una libreta y anotar los nombres de todos ellos. Son muchos y la mayoría disfrutan de su pequeño momento de protagonismo a lo largo de la novela.

Esto de manejar tantos personajes juega a su favor, pero también en contra. Hay capítulos que se centran en la hija de Álex y que nada tienen que ver con el caso, y aunque se puede agradecer que todos los personajes tengan presencia y personalidad resulta innecesario a la hora de hacer avanzar la historia. En mi opinión, creo que Pattenson pretende acercarnos un poco más a los conocidos de Álex Cross de manera anecdótica, para homenajear así a su personaje más recurrente y de paso crear expectación sobre futuras novelas en las que los volvamos a ver. También ocupan un lugar importante su esposa, sus primos, tíos... pero sobretodo, sus padres. La historia de sus padres evoluciona a lo largo de toda esta novela y para los fans del personaje resultará muy, muy interesante. Lo fue incluso para mi, y eso que es lo primero que leía de él.

Volviendo a las tramas principales... sí, también son varias. Se cruzan el juicio sobre su primo en Carolina del Norte con otra serie de asesinatos en Florida. Así, los propios capítulos alternan su interés en Álex Cross (ejerciendo de narrador en primera persona) o de Coco, una mujer de la que poco sabemos al empezar la novela pero que ya se nos presenta como una asesina.

Pero de nada sirve una trama compleja y un montón de personajes si el final no logra sorprenderte y darle un giro dramático a la situación, ¿No os parece? En eso consiste un buen thriller. Así que yo me mantuve con mis dudas hasta el final, esperando saber si todo se resolvía bien o me iba a quedar con sensación de indiferencia. No la hubo. Si bien el libro me resultó "uno más" durante gran parte de la lectura, su final es simplemente apoteosico y logra salvar una lectura que dista de ser aburrida. Muy adictivo, apenas me duró unos días. ¿El mejor autor de thriller? Yo no diría tanto, pero no decepciona.

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¡Por fin cae en nuestras manos la novela de James Patterson!

Un autor aclamadísimo, con un éxito de ventas sin igual y el numero uno según el prestigioso periódico The New York Times.

Hemos oído hablar tantas veces de las bondades del autor y de la grandeza de su novela que no hemos podido evitar su lectura.

Encontramos en nuestro escritorio un ejemplar de Vías cruzadas, una novela que nos narra Un caso de Alex Cross, su hijo literario que tanta gloria le ha hecho recoger.

Primeramente estamos un poco recelosos pues estas obras a veces esconden mucha belleza pero se colapsan con tanto marketing y campañas publicitarias. Tanto es así que a veces dudamos que no sean grandes mentiras vestidas con mucho dinero invertido en proyección hacia el público.

Aquí va nuestro “mea culpa” y una gran discusión literaria en que nos damos cuenta que este sí que es un buen libro y la fama que le preceden se la merece.

Todos hemos querido zambullirnos en sus páginas y concluimos que es brutal, genial, superior, un thriller a otro nivel, una novela con personalidad, diferente a todo.

De la mano de Alex, un grandísimo hombre que es detective, psicólogo, cazador de asesinos en serie y sobretodo un hombre de familia nos enzarzamos en una novela que cambiará su destino.

Después de treinta años vuelve a su Starksville natal para investigar un crimen en el que el principal acusado y sospechoso es su propio primo.

Él quiere a su familia y hará lo posible para sacarle esta mancha de encima pero… y si su primo no es ese chico ingenuo y bondadoso que conocía hace tantos años.

¿Podemos cambiar tanto en treinta años? ¿Podemos cambiar nuestra naturaleza de manera radical?

¿Este chico es culpable o víctima de un gran engaño?

La investigación incomodará al pueblo y hará que él mismo se enfrente a su pasado y a sus raíces.

Con un ritmo trepidante saborearemos el valor de la confianza, de la duda razonable, de la justicia y de la venganza.

De la mano de Duomo podemos leer uno de esos thrillers detectivescos que tanto os recomendamos.

La novela negra nacional está muy bien y cada vez tiene más autores y adeptos pero seamos realistas y admitamos que los europeos y los americanos nos llevan años de ventaja.

¡Rendiros a su encanto!
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Vias cruzadas comienza cuando nuestro protagonista Alex Cross, detective del FBI decide volver a Starksville, Carolina del Norte con su familia, ya que su primo Tate es sospechoso de la muerte y violación de uno de sus alumnos.

Este libro pertenece a una larga serie de novelas protagonizadas por Alex Cross (hasta el momento son 25, para ser exactos) pero se pueden leer independientemente sin problemas y se entienden perfecto.

En esta historia policíaca nos vamos a encontrar con dos historias paralelas que se entremezclarán a medida que avanzamos, una de ellas cuenta la historia del primo de Cross, Tate; mientras que la otra relata la historia de un hombre mayor que disfruta y juega con su nieta, y claramente notamos que guarda secretos y que lleva a cabo algún tipo de extraña operación; y una tercera historia que, al principio no sabemos qué relación tiene pero luego todo cobra sentido y vemos que cumple una función muy importante. Esta última se desenvuelve en Florida, donde un asesino serial mata a mujeres de la alta sociedad y roba sus carísimas vestimentas.

Este Thriller es adictivo y se lee muy rápido, engancha al lector desde el primer momento; y finaliza con un giro totalmente inesperado, realmente me sorprendió muchísimo y al mismo tiempo, me dejó encantada, por lo tanto, sin dudas voy a seguir leyendo a Patterson.
La novela está dividida en cinco partes, y cada una de ellas con capítulos cortos, lo cual nos favorece a nosotros, los que recurrimos continuamente al “un capítulo más”.

En resumen, Vías cruzadas es un thriller de suspenso que contiene varias tramas que se entrecruzarán y complementarán un final sorprendente. Una historia llena de secretos, pistas falsas y giros inesperados que nos adentrará en varios temas sociales y personales que harán patente el racismo que aún impera y de cómo el dinero, el soborno y la corrupción afecta a la sociedad.
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Alex Cross, celebridad, psicólogo, ex-agente del FBI y detective de la ciudad de Washington, existe en el mundo literario desde los años 90 y, aunque de un modo u otro ha pululado por las librerías españolas en ediciones de bolsillo (y poca cosa, que no deja de resultar curioso si tenemos en cuenta que este autor es el más vendido del mundo), fue Duomo quien decidió recuperar a este personaje el año pasado en castellano y con una edición a su altura. Y lo hicieron empezando por el final, con el que en aquel momento era la última publicación de la saga, Cross Justice, publicado en 2015 (aunque el año pasado ya salió el siguiente, Cross the line, que hace el número 24 de la saga, nada menos).

El caso es que, por lo que comento arriba, mi único acercamiento hasta ahora a este personaje había sido a través del cine y, sinceramente, salvo los actores y retazos sueltos de las películas, me acuerdo de más bien poco porque las vi hace un montón de años. Vamos, como si no conociera de nada a Alex Cross. Hasta ahora.

En Vías cruzadas nos encontramos con dos tramas aparentemente inconexas que, como suele suceder, convergen en un punto de la historia. Por un lado tenemos a Coco y sus andanzas en Palm Beach, narración omnisciente en tercera persona, y por el otro la trama de la que el propio Cross es en cierto modo protagonista, que él mismo narra en primera persona. Me sorprendió bastante que la historia comenzase precisamente con Coco, como si fuese el eje de lo que está por venir cuando realmente su trama es secundaria (en cierto modo... o no... bueno, ya llegaremos a esto. Eso no quita para que el prólogo que protagoniza sea fantástico).

La base importante de la historia es la que atañe a la familia Cross en una pequeña ciudad de Carolina del Norte. Alex Cross vuelve a su ciudad natal, Starksville, después de más treinta años de ausencia, para ayudar a su primo, acusado de violar y asesinar brutalmente a uno de sus alumnos. Absolutamente todas las pruebas están en su contra pero toda su familia cree en su inocencia. Cross no solo tiene que hacer frente a las apabullantes evidencias y probar si son veraces o han sido amañadas, sino que debe luchar contra cierto sector de la ciudad que no le quiere allí fisgando, contra su ponzoñoso ambiente, el racismo todavía latente en aquella zona del país, la corrupción que invade todos sus estratos sociales... y contra su propia historia, la de Alex y sus padres, guardada hasta ahora en lo más profundo de su memoria y que empieza a resurgir para poner todos los puntos sobre las íes, para aclarar recuerdos inconexos y para sacar a la luz una verdad durante mucho tiempo enterrada.

Y así avanza la novela, donde un 80% gira en torno a la trama de Cross, Starksville y el caso de su primo, y el otro 20% gira en torno a Coco y Palm Beach. Tengo que reconocer que la trama de Coco me desconcertó bastante al principio, porque ni le veía sentido dentro de lo que se estaba contando ni veía hacia donde quería llevarnos Patterson con ella. Ocurre a muchos kilómetros geográficamente hablando de donde está Cross y cuando parece que se resuelve sigues sin entender muy bien cuál es su cometido dentro de la narración. Huelga decir que sí, que tenía su razón de ser y confieso que no vi venir el giro final... aunque claro, una vez que lo tienes delante ves que las pistas estar, lo que se dice estar, estaban. No las vi. Pierdo facultades.

Otra parte muy importante de la historia es la vida familiar del protagonista. Cross vuelve a casa y con eso parece que también ante el lector se desnuda como persona. Conocemos a toda la saga de los Cross (tías, tíos, primos... y a su maravillosa abuela, Nana Mama, personaje que aparece en todas sus demás novelas porque vive con él). Su mujer, también detective de la policía de Washington, le ayuda a lo largo del caso; su hijo vive fascinado por los documentales más variopintos y tiene preguntas para todo... pero cuando más humano se muestra es cuando nos habla de su hija, de lo que espera de ella, de lo que puede llegar a ser, del modo en que la ve como padre y lo orgulloso que está de ella. de alguna manera, Patterson se las arregla para compaginar el lado más humano de Cross, sus pausas, reflexiones y confidencias, con una trama habitual de thriller que, aunque no es vertiginosa, ciertamente tampoco da descanso.

Porque sí, estamos ante un thriller en el que pasan muchas cosas pero hay tiempo para todo. Para investigar e intentar desentrañar el caso de su primo, para colaborar en el caso de Palm Beach, para intentar desenredar su propio pasado, para enfrentarse a la gente que lo quiere lejos de Starksville, para correr, huir, perseguir... pero también para sentarse en unas gradas y a ver a su hija correr hacia una beca en una universidad de prestigio, o para cenar con toda la familia rodeado de olores, fotos y recuerdos que le hacen pensar en lo que una vez pasó... o él cree que pasó.

Leyendo el libro, que yo juraría que es el primero que leo de Patterson, entiendes un poco su vitola de autor más vendido del mundo porque es la viva definición de literatura best seller (creo que incluso está en el Guinness de los récords por alguna cosa relacionado con esto), además de que publica varios libros al año (aunque también se dice que semejante abundancia de creatividad se debe al uso de negros que le ayudan). El caso es que el libro se lee en un suspiro, de que te quieres dar cuenta has avanzado cinco veces más de lo que creías. Es lectura fácil, entretenida, efectiva, a ratos trepidante, con una prosa sencilla y práctica repartida a lo largo de nada menos que 102 capítulos breves y precisos... y tiene un protagonista que te cae bien sin tener que esforzarse mucho. Te cae bien, sin más. Alex Cross es así de cool.

No sé si en libros anteriores de Cross se habla sobre su pasado y su infancia con la misma intensidad y profundidad que en este, pero lo cierto es que yo con esta historia tuve la sensación de que daba igual haberlos leído que no, porque parece como si se hablase por primera vez sobre ese aspecto. No parece el libro taitantos de una saga. Sí que se hace referencia a otros casos, pero están totalmente implementadas en la historia. Parece el primer libro sobre un personaje... cuando conoces de dónde viene, por qué es cómo es. Por eso tengo tanta curiosidad por leer La hora de la araña; me apetece muchísimo descubrir cómo se presento realmente en sociedad este personaje en la novela con la que comenzó la saga de este detective en 1993 y que Duomo acaba también de editar. Y es que he sido tan suertuda de ganar un ejemplar en el sorteo organizado por Laky para su lectura conjunta... vamos, que pronto volveré nuevamente a hablaros de Alex Cross.