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De esta secuela honestamente no estaba ni cerca de tener hipótesis sobre el contenido. Honestamente no sabia como podría continuarse una historia como esta, pero la verdad que en menos de 10 capítulos me dejó con la boca abierta. Finalmente empezamos a entender porque Jenny y Alex pueden viajar a través de diferentes universos y vivir diferentes vidas, y finalmente entendemos que corno pasa con Marco y porque esta en memoria! Honestamente en el final de Multiverso quedé medio boba y llena de preguntas. Memoria comienza en el mundo después de la caída del meteorito y del fin del mundo como lo conocemos, técnicamente derivando en una nueva era de hielo... hasta lo que yo entiendo. Y cuando creemos que vamos entendiendo todo... BOOM! estamos en la tierra 500 años después de esto y aparecen un monton de personajes que ni más palida idea de quienes son. Lo que me lleva a preguntarme muchísimas cosas: ¿Como se repobló la tierra si nadie sobrevivió al fin del mundo? ¿Como sabemos que son 500 años si ningun celular que haya sobrevivido pasa el calendario del 2020? En fin. La historia da un vuelco antinatural e insalubre para el lector cuando la trama se empieza a desenvolver en esta extraña montaña rusa que ya es firma registrada de nuestro amigo Leo. Una vez en el final no podía decidir si el libro me gustó de verdad, o si lo odié. Pero en algún momento de este debate sentimental me sentí con un vacío existencial al pensar que tenia que esperar quizás años para leer Utopía. Y ahí fue cuando me di cuenta que el libro me encantó y me marcó muchísimo. Y en ese momento entendí le vendí mi alma a Leo Patrignani y que voy a leer cualquier cosa que escriba. |
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