La cordura del idiota

Marto Pariente se marcado una gran novela con La cordura del idiota, estamos ante una historia que crea adicción y que hace que el lector ame a la novela negra. El autor ha creado unos personajes llenos de matices, con sus grises. Aquí no hay ni blanco ni negro, no todo es lo que parece, es más, nos encontraremos ante una trama llena de detalles y de algunos giros en el argumento que dejarán sorprendidos, para bien al lector.

Marto ha ambientado la novela en un pueblo ficticio dentro de la provincia de Guadalajara, un lugar donde se conoce prácticamente todo el mundo y donde sólo hay un agente de la ley, Toni Trinidad, uno de los policías más atípicos que nos vamos a encontrar dentro del panorama de la novela negra. Un personaje que tiene una peculiaridad que destaca sobretodo: no puede ver ni una sola gota de sangre, ya que si la ve, automáticamente se desmaya.

A simple vista parece un policía con pocas luces, dando la sensación de que hace todo mecánicamente, aunque como iremos descubriendo a lo largo de la historia, esconde más de un secreto. Su rutinaria vida se verá alterada cuando sin quererlo ni beberlo se involucrará en un asunto donde todo su mundo se verá patas arriba, cortesía de su hermana Vega, que contraerá una gran deuda con el mafioso del lugar, llamado El Colmenero, un ser al que no le tiembla el pulso a la hora de quitarse de en medio a la gente que le estorba.

Toni se verá en medio de disputas por el control del tráfico de drogas de Ascuas, el pueblo donde transcurre la mayor parte de la trama.

La cordura del idiota tiene todos los elementos que hacen grande a la novela negra, pero lejos de estar llena de tópicos y de clichés, el autor ha cogido todos esos elementos y los ha hecho suyos, pasándolo por su filtro personal, con una prosa potente y contundente, pero a la vez elegante. Tiene altas dosis de dureza y de violencia, y donde Marto demuestra que no le tiembla el pulso a la hora de narrar con todo lujo de detalles las situaciones más duras y más violentas, pero que no son para nada gratuitas. Todo tiene su lógica y razón de ser.

Una de las características que me gustaría destacar son las pinceladas de humor que nos encontraremos en algunos momentos puntuales, con unos diálogos que son una auténtica maravilla y dignos de enmarcar, dichos diálogos darán lugar a algunas situaciones absurdas pero que dotan de una enorme frescura a esta gran novela. Otro de los puntos fuertes son sin duda alguna los personajes, desde el principal, Toni Trinidad hasta los secundarios, incluso los que aparecen puntualmente, todos están muy bien perfilados y desarrollados.

La cordura del idiota tiene un aire que nos recordará a esa gran película que es Fargo, en gran parte debido al estilo tan visual y cinematográfico con el que el autor ha dotado a toda la obra, pareciendo que estemos viendo una película o una serie.

Si tuviera que ponerle algún pero sería algo anecdótico, solo que su lectura se me hizo corta, de lo adictiva en que se convirtió. Hubiera firmado porque la novela hubiera sido más larga. La cordura del idiota es otro ejemplo de la buena salud de la que goza la novela negra hecha en territorio nacional y que no tiene absolutamente nada que envidiar a la gran cantidad de títulos que nos llegan de fuera.

Tiene su estilo propio, es fresca, está llena de buenos personajes, a cada cual mejor, una trama sólida y sin fisuras, donde no hay nada al azar, no sobra ni falta nada. Y tiene a un personaje principal que es digno de figurar entre los mejores que ha dado la novela negra en los últimos años. Como lector, animo al autor a que escriba más historias sobre Toni Trinidad y los demás personajes de esta gran e inolvidable historia.
Sobra decir que recomiendo encarecidamente la lectura de la cordura del idiota, tanto a los amantes del género negro como a todos aquellos que se quieran iniciar en dicho género, y también a todo amantes de la buena literatura, sea del estilo que sea.

No me extraña que haya ganado los premios Novelpol y el de Cartagena negra, aparte de haber estado nominada a otros. Es muy merecedora de todos esos galardones. Marto Pariente es con todo derecho, un autor de referencia dentro de la novela negra y un escritor que hay que seguir en sus próximas publicaciones.

Sinopsis:
Toni Trinidad es un atípico policía de pueblo. Un tipo solitario e imperturbable, pero que se desmaya si ve una sola gota de sangre, sobre todo si es la suya.

Sin embargo, su tranquila existencia está a punto de cambiar; su puesto de trabajo pende de un hilo y por si esto fuera poco, su hermana Vega - una de las pocas personas que de verdad le importan en este mundo- ha contraído una deuda que no puede pagar con un cruel narcotraficante de la zona que se hace llamar el Colmenero.

Toni Trinidad comprobará que no es fácil mantener el tipo rodeado de narcos, policías, sicarios y políticos corruptos, sobre todo, cuando las circunstancias te obligan, una y otra vez, a verte rodeado de sangre y de crímenes violentos.

Ambientada en lo más profundo de la campiña de Guadalajara, en un lugar en mitad de ninguna parte camino de los pantanos y con un elenco de personajes al más puro estilo Fargo, Marto Pariente narra, a ritmo de guión cinematográfico, una crónica sobre la soledad, la corrupción urbanística, los traumas infantiles y el amor incondicional entre hermanos.

El pequeño rinconcito de Bey..*
NOVELA NEGRA Y SUBGÉNEROS
LA CORDURA DEL IDIOTA. MARTO PARIENTE
by El pequeño rinconcito de Bey - agosto 18, 2020



Marto Pariente nos traslada a Ascuas, un pueblo ficticio de Guadalajara, allí comienza esta gran obra del género country noir. Con ella demuestra que este género no solo es cosa de americanos, y que Marto sobresale dentro de él en nuestro país.


«Ascuas crecía entre cerros pelados y secarrales, camino de los pantanos. Apenas una rasgadura. Se conformaba con una docena de calles torcidas que salían de la plaza del pueblo como las venillas rotas de los alcohólicos. La llaga, el derrame, estaba ceñido por un puñado de carreteras secundarias que lo constreñían como varices en la pierna de una anciana ».

El suicidio de uno de los habitantes rompe el hielo en las primeras páginas. El Triste aparece colgado de un árbol.

«El Triste era el loco oficial del pueblo, hay uno en cada localidad, a veces más. Descarnado, la piel cuarteada por el sol y el eterno medio cigarrillo apagado y pendiendo de los labios».

Ese mismo día, Toni había desayunado con él. Nada hacía presagiar ese acontecimiento. Él es el único policía del pueblo, protege sus calles sin arma, puesto que nunca le ha hecho falta, incluso su fobia a la sangre apenas le da problemas. En Ascuas nunca, nunca, pasa nada. Hasta que pasa.

«Yo soy un policía de pueblo grandote y con cara de perro pachón».

Vega ayuda con la grúa de su trabajo al juez de paz y a los guardias a bajar al hombre del árbol. Ella es su hermana, una mujer atormentada por el pasado que busca borrar sus recuerdos en el alcohol.

Mientras tanto, no muy lejos de allí, alguien celebra esta muerte.

En otro lugar, aún más cercano, unos mafiosos preparan un gran golpe. Mientras que unos policías intentan darles caza.

Este solo es el comienzo de algo muy grande, una novela negra rural que impacta. Con una prosa muy directa, incluso granuja en algunos momentos, Marto nos presenta a unos personajes cercanos y reales. Siendo capaz el lector de visualizarlos a la perfección, gracias a su gran caracterización. El humor y la ironía hacen de ellos la distinción en comparación a otras novelas del género, aunque no pierde los valores principales del mismo, enfrentándose a los bajos fondos de la sociedad: corrupción, intereses, drogas y mentes frágiles sumidas en la oscuridad. La violencia estará muy presente en la trama, pero a una intensidad más pausada, complementándose así a la tranquilidad y al compás del día a día de un pueblo de la España vaciada.

El autor hace uso de tres tipos de narradores durante la novela, alternando su protagonismo a lo largo de sus 288 páginas. En primera persona, para los capítulos de Toni, en segunda persona para los dedicados a Vega y en tercera para el resto de personajes. Estos secundarios, pero con mucha fuerza e importancia en la trama.

El ritmo de la novela es ágil desde el comienzo, el lector irá descubriendo, poco a poco, los entresijos de Ascuas. El autor le mantendrá en vilo hasta el final, haciéndole dudar hasta de su propia sombra.

Marto consigue sorprender. Ha creado de la nada un escenario turbulento, angustioso y real para el disfrute de los amantes del género noir. Por lo que no es de extrañar los logros ya conseguidos con La cordura del idiota. A comienzos de año el autor se hacía con el premio Premio Novelpol, y en estos días, a esperas del fallo, es finalista en dos famosos festivales de novela negra como lo son Tormo Negro Masfarné y Cartagena Negra.

No tengo más que añadir. Si eres amante del género y aún no lo has leído, no sé a qué estás esperando.













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¿Sabéis lo que es el country noir? La verdad es que yo tampoco sabía de su existencia, pero por lo visto se trata de una novela negra con ambientación rural. Y ese es el caso de la cordura del idiota.
Su ambientación es rural, pues nos lleva hasta Ascuas, un pequeño pueblo de mil habitantes de Guadalajara, ficticio, eso sí. Un pueblo con un único policía: Tony Trinidad, que se dedica a patrullar la población, a controlar la salida del colegio y a aparentar que hace algo, aunque poco hay que hacer en un pueblo en el que nunca pasa nada. Hasta que pasa, hasta que se suicida el tonto del pueblo. Porque en un pueblo que se precie, tiene que haber un idiota y al de este pueblo le llaman el Triste, que tiene unas tierras que se niega a vender a una promotora que pretende hacer una urbanización de lujo con campo de golf. ¿Loco?

Gran personaje el Triste, pero dura muy poco. En realidad el protagonista es Toni Trinidad, que probablemente termine siendo para mí, mi personaje literario del año. Porque un policía que es incapaz de ver una gota de sangre sin desmayarse, da igual que sea suya o ajena, es un buen punto de partida. Como consecuencia de ello, la pistola la deja en casa, no vaya a ser que dispare a alguien, le hiera y se desmaye ante la sangre. Claro, que para lo que le hace falta en un lugar tan tranquilo como Ascuas donde nunca pasa nada… Hasta que pasa. Y nada menos que con su hermana, que decide quedarse con dinero de El Colmenero, hasta hace muy poco el señor de la droga de la zona, por más que su imperio esté de capa caída. Como además por aburrimiento más que por otra cosa Toni decide investigar el suicidio de el Triste, aumenta el número de gente que se pone nerviosa, no vaya a ser que se estropee el negocio de la urbanización, por lo que mandan al pueblo a un peculiar sicario para que resuelva el embrollo.
Al tiempo, El Colmenero no puede dejar por alto el robo que ha sufrido y manda a los hermanos maquénroe, llamados así no por jugar al tenis, sino por manejar los bates como si fueran raquetas de tenis.

Con todos estos personajes y más que van apareciendo a lo largo de la cordura del idiota, nos encontramos con una novela muy cinematográfica que me hizo recordar en muchos momentos a una película de Tarantino, eso sí, con una banda sonora muy española y un estilo muy poco americano. Muy de España cañí. Algo que sin duda es lo que le da mucho de su encanto a este relato.

No ha sido una sorpresa encontrarme con un personaje como Toni Trinidad, porque ya me lo anticipaban todos los que me recomendaban el libro. Buena parte del por qué me ha gustando tanto esta novela está en él, que sin duda es uno de mis personajes literarios del año. Porque aunque sea una novela con mucha acción, tiene más de novela negra que de thriller, porque la característica fundamental de esta novela son sus personajes. Unos personajes difíciles de olvidar.
Junto a los personajes, una ambientación muy conseguida que huye de las grandes ciudades para llevarnos a un pueblo perdido (e inexistente) de esa España rural y que se va vaciando, donde todos conocen a todos y crean un modo de ver la vida tan diferente al de las grandes ciudades.

A todo ello hay que sumarle algo que yo valoro mucho en una buena novela negra: mucho sentido del humor. Es difícil abandonar la sonrisa durante la lectura de esta novela. Incluso en algunas de sus escenas más salvajes, algo que sin duda es de agradecer, porque la sangre no llegará a desmayarnos como al protagonista de esta novela.

Por todo ello, La cordura del idiota es una de las novelas que estará sin duda entre mis mejores novelas negras del 2019.
Enlace: https://www.elbuhoentrelibro..

Los que me conocéis sabéis que si un libro tiene mucho éxito tiende a no gustarme, así que empecé a leer La cordura del idiota, de Marto Pariente con cierto escepticismo. Antes de que me diera cuenta lo había terminado, es un libro magistral.



En Ascuas, un pueblo de no más de 1000 habitantes, con un bar y un policía local, viven los hermanos Toni y Vega Trinidad. Nunca pasa nada más allá de pequeños escarceos y borracheras sin gracia, como en casi todos los pueblos castellanos. Toni, que ejerce de policía sin demasiadas complicaciones, ninguna para ser exactos. Se desmaya si ve una gota de sangre lo que no es problema en un pueblo pequeño. Hasta que un día aparece colgado en su casa el Triste, su amigo, el idiota oficial del pueblo, no tan idiota a la larga. A partir de un simple suicidio se desencadena el fin del mundo. Mafias de la construcción, mafias del narcotráfico, chorizos de medio pelo, políticos sin dos dedos de frente, todos contra un hombre sencillo que se desmaya al ver una gota de sangre.



La cordura del idiota está narrada de manera sorprendente. Los capítulos de Toni se narran en primera persona, dejándonos conocer de primera mano las impresiones y los miedos del protagonista. Los capítulos que protagoniza Vega, su hermana, se narran en la complicada segunda persona pero sin resultar artificioso. Es como si el ojo que a veces sentimos que nos vigila le contara a Vega lo que le está ocurriendo. Vega es un personaje fundamental para conocer el pasado, el presente y el futuro de Toni, una mujer perdida que se deja llevar por las circunstancias sin intentar rebelarse contra ellas y que toma una decisión, por una vez en la vida, que va a salirles cara. Para el resto de los personajes se utiliza la tercera persona. Esta alternancia de voces podría parecer pretenciosa y poco creíble, pero Marto Pariente escribe de manera que esta técnica se convierte espléndidamente en la única forma de que el lector conozca todas las aristas de esta historia rural, la única forma natural.



Pero La cordura del idiota no sólo alterna la voz narrativa, alterna el presente y el pasado, a cual más oscuro, alterna las escenas terribles que narran el pasado de dos niños que nacen sin suerte con escenas hilarantes en las que presenciamos interrogatorios imposibles, con carreteras que nada tienen que envidiar a las largas carreteras del desierto americano, con un perro, Trípode, que supera con creces a los inquietantes coyotes y, por supuesto, canciones de Mecano que nada envidian a los narcocorridos.



Hacedme caso que sabéis que nunca os engaño. La cordura del idiota os va a hacer pasar unas horas, no os va a durar más, que van a reconciliaros con vuestras, ojalá, aburridas vidas. Yo estoy encantada con que las horas pasen lentamente…


Por los campos de Dios el loco avanza.

Tras la tierra esquelética y sequiza

—rojo de herrumbre y pardo de ceniza—

hay un sueño de lirio en lontananza.

Huye de la ciudad. ¡El tedio urbano!

—¡carne triste y espíritu villano!—.

No fue por una trágica amargura

esta alma errante desgajada y rota;

purga un pecado ajeno: la cordura,

la terrible cordura del idiota.


Antonio Machado.
Enlace: https://www.salamandranegra...

De este libro debo decir que me ha encantado todo, pero sobre todo cómo su autor consigue hacer una novela negra con un toque de humor y que además atrape al lector, de principio a fin.
La trama está ubicada en una localidad inventada, Ascuas, en la provincia de Guadalajara y donde nuestro protagonista, Toni Trinidad, reside y trabaja como el único policía local.
Ya la creación del protagonista se merece un aplauso, por sus rasgos característicos, su personalidad única, su torpeza y sus casi nulas habilidades. Con él he pasado de la sonrisa a conseguir llegar al límite de mis nervios.
Si hablamos de la trama, me sorprende cómo puede crear un lío de tales dimensiones, propio de una película, en un lugar donde aparentemente nunca pasa nada. Su desenlace se desarrolla de manera natural, sin forzar una resolución. Todo se deshace con la misma velocidad que se complica desde el principio.
Una vez acabado el libro, si analizamos lo leído, observamos que ha tocado muchos temas: la corrupción e intereses inmobiliarios, el mundo las drogas, las rencillas, la lucha por el poder, pero también el amor fraternal y la amistad. Todo ello mezclado con humor e ironía. Un cóctel perfecto que hace destacar esta novela, de otras del mismo género.
Desde luego es un libro que aconsejo si quieres disfrutar de una buena lectura. Ahora toca esperar a que su autor nos sorprenda con otra obra maestra.