Es una novela que descubrí por casualidad y, al conocer su existencia, no pude evitar hacerme con ella y leer a la autora en esta faceta tan poco conocida. Con este libro, Emilia Pardo Bazán se adelantó unos cuantos años a Agatha Christie en cuanto a que una mujer escribiese sobre novela policíaca. La motivación de la autora era crear un personaje semejante al de Sherlock Holmes, tan conocido en esos momento y en la actualidad, y dotar al personaje principal de las novelas de algo más de sentimientos, pese a ser una persona con un alto intelecto, capaz de resolver cualquier crimen. La novela comprende un relato corto y la novela en sí. Desde mi punto de vista el relato corto es más profundo, ya que la premisa de ambos es la de siempre: se comete un crimen, el detective amateur quiere resolverlo y se van presentando los hechos y los personajes. Emilia Pardo Bazán consigue condensar en las páginas del relato mucho mejor la personalidad de Selva y los personajes secundarios y dotar de mayor coherencia el texto. Probablemente por eso mismo no llegó a publicar esta novela haciendo que sea un texto rescatado de sus escritos y publicado de forma póstuma (recordemos que el relato sí que lo publicó, pero la novela no). En resumen, es una faceta de la autora que recomiendo mucho. |