La nación de las bestias. Leyenda de fuego y plomo

Después de años de intentar saber quién es, Elisse por fin ha descubierto cuál es su propósito en la vida, cuáles son sus capacidades y qué consecuencias acarrea esto. Por eso, ha decidido abandonar Nueva Orleans y a la familia que encontró allí y se dedica a vagar sin rumbo por los Estados Unidos para poner la máxima distancia posible y así proteger a los que ama de sí mismo. No obstante, este viaje no lo realiza solo, pues le acompaña el monstruo que ahora vive en su interior. Sus pasos le llevarán al desierto de Utah, donde conocerá a Adam, un chico un tanto extraño con el que en seguida conectará y del que pronto se hará un buen amigo. Adam y su madre dejarán que Elisse se quede una temporada en su casa. Pero ni siquiera tan lejos de Nueva Orleans estará a salvo. Nuevos errantes pululan por el desierto y nuevos retos relacionados con el vudú y la magia se presentarán ante Elisse, quien se verá envuelto en ellos por más que quiera evitarlo.

Leyenda de fuego y plomo está ubicado unos meses después del final de la primera parte. En esta ocasión nos toparemos con un escenario muy diferente a la mágica Nueva Orleans, pues transcurre en las áridas tierras de Utah, donde Elisse va a parar tras huir de la ciudad y, por ende, de Tared y su tribu de errantes Comou Bayou. Ahora dentro de Elisse ruge un terrorífico monstruo de hueso al que debe ser capaz de controlar si no quiere poner en peligro a aquellos a quien ama. Pero será precisamente en Utah donde vuelva a toparse con nuevos enemigos y con un tipo de magia mucho más inquietante y alarmante que el vudú, tomando los derroteros de la alquimia. La autora, por lo tanto, nos presenta nuevos paisajes, nueva magia y nuevos personajes, al tiempo que conecta este segundo libro con la trama principal de El señor del Sabbath y, por supuesto, también con aquellos otros personajes que en su momento conformaron la vida de Elisse.

Nuestro protagonista ha sufrido una gran transformación y ya no es el Elisse inocente y perdido que conocimos. Descubrir cuáles son sus poderes y tener que enfrentarse al Barón Samedi y a Laurele hizo que su perspectiva cambiara y que tuviera que madurar de golpe. de ahí que en esta segunda entrega nos encontremos con un hombre adulto que ha tomado la drástica decisión de abandonar su hogar y vagar sin rumbo para tratar de entender el nuevo poder que palpita en su interior y, sobre todo, para proteger a los demás de sí mismo. Sin embargo, esta travesía no dejará atrás los monstruos que desean hacerse con él, por lo que una vez más "algo" está buscando a Elisse y no dudará en utilizar todas las artimañas posibles para hacerse con él. Nos encontramos con una historia mucho más oscura y siniestra, con un protagonista que nada tiene que ver con el joven asustado que llegó a Estados Unidos por primera vez. Elisse está aprendiendo a la fuerza sobre sobre sí mismo y sobre sus límites. Eso le ha convertido en un protagonista bastante deprimente y frustrado que le imprime dicho tono a la novela, ya que gran parte de la narración es desde su perspectiva. Podemos entender el peso que lleva sobre sus hombros, las consecuencias que esto acarrea y por qué ha abandonado a Tared y los suyos sin dar explicaciones, independientemente de que compartamos sus decisiones. Sin embargo no os preocupéis, que nuestros viejos amigos errantes seguirán muy presentes en el libro y no han sido olvidados por la autora.

También tenemos personajes nuevos como Adam Blake, quien desde el principio quiere ayudar a Elisse y para ello habla con su madre y le ofrece quedarse en su casa hasta que se recupere antes de continuar con su viaje. Es un personaje que te cae bien enseguida a pesar de sus rarezas y la relación que establece con Elisse me gustó muchísimo. Incluso hizo que a veces me olvidara de Tared, sobre todo porque este apenas tiene protagonismo al menos durante la primera mitad. al principio, Elisse se sentirá a gusto y cómodo con los Blake, pero conforme más tiempo pasa en aquella casa, más empieza a sospechar que hay algo oculto en la misma. Aprovecho para advertiros aquí de que no os encariñéis demasiado con los personajes. Os recuerdo que Palova se caracteriza por crear tramas violentas y sangrientas donde siempre se sufre mucho con quienes las protagonizan, así que avisados quedáis 😂. Por otro lado, la autora nos presenta a una nueva tribu de errantes, los Red Bufalo, que viven en el desierto de Utah y con quienes Elisse se verá involucrado casi por casualidad y tendrá que ayudar en la búsqueda de Alannah, una de las errantes que ha desaparecido de forma misteriosa y su familia es incapaz de encontrarla, a pesar de las habilidades de las que disponen gracias a sus ancestros.

Se nota mucho la evolución de la autora con respecto a la primera parte de la tetralogía. La trama de Leyenda de fuego y plomo es, como ya he comentado, mucho más oscura y siniestra, tanto los conflictos que nos plantea, como los fantasmas que acarrean los propios personajes, así como la magia y los monstruos que nos presenta. de hecho, en este sentido me gustó incluso más que en el primer libro. El estilo de Mariana Palova es directo, te cuenta las cosas sin demasiadas florituras, algo que encaja perfectamente con el tono tétrico y funesto de la historia. Una vez más, los capítulos son narrados a dos voces: por un lado tenemos a Elisse contándonos sus peripecias por Utah y, por otro, a ese nuevo monstruo intangible y desconocido que le persigue y quiere matarle.

A pesar de que, en términos generales, es una novela que me ha gustado, no he conseguido disfrutarlo como se merecía. Esto se debe a que pasó mucho tiempo desde que leí la primera novela, por lo que no recordaba bien los detalles y tenía muy difusos tanto a los personajes, como la trama y el final. No sentí la necesidad de releerlo porque pensaba que la autora nos haría un pequeño resumen al principio del libro, dado que el mundo que ha creado es muy complejo y está lleno de personajes. Sin embargo, no fue así y la edición tampoco cuenta con un glosario que ayude al lector a recordar. Esto hizo que las primeras 200 páginas se me hicieran cuesta arriba porque se mencionan eventos o personajes del primer libro, lógicamente, de los cuáles yo no tenía ningún recuerdo y Palova tampoco se molesta en explicarlos con detalle para refrescárselos al lector. Leyendo otras reseñas, he visto que esto es algo recurrente entre los lectores, por lo que sería un acierto si la editorial incluyera aunque fuera un glosario de términos al que acudir. Es por eso que me costó muchísimo reenchancharme a la trama y reencontrarme con los personajes porque aunque los conflictos que se plantean aquí poco tienen que ver con los de su precuela y se podría decir que el argumento es independiente, siguen estando intrínsecamente relacionados, especialmente en cuanto a personajes se refiere. Asimismo, la primera mitad de la novela está dedicada a presentarte la situación de Elisse después de varios meses, su periplo por el desierto, su condición, el nuevo escenario y los nuevos personajes, haciendo que la acción transcurra con lentitud y añadiendo aún más dificultad a mi interés por el libro.

Leyenda de fuego y plomo es una digna continuación de la nación de las bestias. Si bien es una novela que habría disfrutado muchísimo más si hubiera releído el primero, he podido constatar la evolución Mariana Palova en sus tramas, personajes y estilo y el final que nos presenta es lo suficientemente jugoso como para esperar con ganas la siguiente entrega.
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