Fight Club: A Novel

Este es uno de los casos en que vi la película antes que el libro. Vi la película allá por 2009, ya no recuerdo exactamente, y quedé hipnotizado. Me enteré después que estaba basada en un libro. Desearía no haber visto la película antes de leer el libro, pero bueno, no tengo una máquina del tiempo. El narrador sin nombre está enajenado en una sociedad consumista y decadente, odia su trabajo, su vida, todo. Un encuentro con Tyler Durden, un personaje misterioso, lo pone en un rumbo directo a la colisión. Junto a otros hombres descartados y relegados a trabajos odiosos y miserables, forman un club clandestino de peleas a puño limpio... no puedo contar mucho más sin caer en spoilers.
Creo que el libro y la película han perdurado en el tiempo (son de 1996 y 1999 respectivamente) porque los integrantes del Club de la pelea no son agentes secretos, científicos, ni nada parecido. Son mozos, mecánicos, oficinistas, personas comunes y corrientes. Hartas de ganar poco dinero, hartas de sus empleos, hartas de las mentiras de la televisión. Y en ese sentido es un sentimiento que puede aparecer en cualquier parte: en USA, en América Latina, en Japón... ¿Quién no se ha sentido al menos una vez, estafado por la vida? ¿Atrapado en un empleo odioso por un sueldo miserable, que se agota al día siguiente de cobrarlo? ¿Quién no ve los modelos de los comerciales y siente envidia y resentimiento por sus cuerpos que la genética y el gimnasio hacen parecer perfectos? Esa furia y desánimo encuentran una válvula de escape en el Club de la Pelea. No diré más nada, excepto lo siguiente. ¿Quién no ha soñado con decir: "La primera regla del club de la pelea es que jamás hablas del club de la pelea"?