Para parar las aguas del olvido

Definitivamente, no ha sido una lectura para mí. No puedo decir que no sea un libro bueno, porque lo es; pero no ha sido lo que esperaba.

En este libro no nos encontramos una novela, sino que se trata de las memorias de Paco Ignacio Taibo I y de sus amigos. Aunque el género dista mucho de pertenecer al tipo de libros que suelo leer, la época en la que vivió el autor me genera mucho interés y por ello decidí leerlo. Pienso que es imprescindible que conozcamos el pasado para poder avanzar y para no cometer lo errores que tuvieron lugar no hace tanto tiempo.

En estas memorias su autor nos acerca a la época de la Guerra Civil española y a la de la posguerra, y con ella a las cartillas de racionamiento, a la pobreza, a la dictadura, al silencio obligado, … El texto está narrado en primera persona, por lo que es el propio autor quien que nos relata cómo transcurrió su niñez y adolescencia entre bandos y miedos, entre paredes y silencios, entre bombas y paseos. Hasta aquí la premisa me parecía mas que tentadora, pero en ocasiones me ha costado seguir el hilo, pues introduce a muchos personajes conocidos antes y ahora; además, he tenido la sensación de que algunos diálogos no aportaban demasiada información y se me hacían algo lentos y repetitivos.

A su favor diré que está dividida en capítulos muy cortos, lo que hace que se lea con mucha agilidad, que aporta información y datos que seguramente no habría conocido de otra forma y que puede ser muy recomendable para todo aquel que quiera saber más de esta época de España.

En cuanto a su portada, sus tres protagonistas reflejan en su mirada gran parte de la época que les tocó vivir. En mi opinión, transmiten una valentía y un desafío latente, dormido. Sentimientos obligados a ocultarse que esperan salir a flote tan pronto como la oportunidad lo permita.

Como curiosidad, el libro incorpora un índice onomástico al final, lo que permite localizar a las personas citadas a lo largo de todo el relato.