Brama Vacilundia

¡Vaya pasada de libro!
Y pensaréis que exagero. Para mí ha sido una historia increíble y tan entretenida, además de divertida, que lo he devorado en nada.
Contiene incluso todo lo que me gusta y no he podido evitar pensar en series o películas que me recordaban a esas situaciones: como enamorada de la fantasía estas criaturas que salen en el libro me han conquistado desde el primer momento; el humor que derrocha el autor no es pesado sino ideal y divertido, hace que el libro sea más cercano y se lea con rapidez; ciencia ficción por el tema de las naves espaciales y las criaturas de otros planetas (me chifla mogollón); aventuras y acción en todo momento, manteniendo al lector enganchado desde la primera página; también nos encontramos con el valor de la amistad y las segundas oportunidades. Y por supuesto un poco de romance no podía faltar.
¿A qué películas me han recordado algunas situaciones? Muchas pero solo diré una: "Cariño, he encogido a los niños", sí, hace muchísimos años de esto pero no he podido evitar pensar en ello. Además igual de divertido y surrealista pero al mismo tiempo el autor lo escribe de forma real.

Me ha encantado todo de este libro y no puedo ponerle pega alguna, salvo que me entristecí cuando terminó porque quería más. Y ese ¿fin? con interrogaciones le daba esperanza a mi corazoncito que echará de menos a estos Vacilundios.
Y os preguntaréis, ¿qué son los Vacilundios? Pues son seres diminutos con cuerpo de musgo que habitan en el bosque, escondidos de los humanos, que acostumbran a volar sobre libélulas (adoro esta criatura, la libélula digo, aunque también los Vacilundios jajaja).

Un día un científico de esta raza la lía arreglando un objeto enemigo que comienza a emitir señales, delatando su posición en la Tierra a los dueños del objeto, que precisamente son los que aniquilaron a casi toda su raza.
Mientras tanto, Mike y su hermana pequeña se van de vacaciones con sus padres a la granja de sus abuelos para visitarlos. Mike no tiene ganas de pasar las vacaciones allí y teme aburrirse pero sus vacaciones pasarán a ser de película (nunca mejor dicho) cuando se encuentra con estos seres diminutos y... Ahh, tendréis que averiguar qué le pasará.
Solo os diré que a partir de ahí todo será un constante movimiento sin cesar.

He de recalcar la increíble e ingeniosa imaginación que posee Manuel. Y además su pluma tan ligera y rápida de leer, con conversaciones divertidas y personajes cuyas personalidades nos conquistan desde el primer contacto.
Al principio del libro el propio autor advierte de que podríamos liarnos con los nombres de los Vacilundios y por eso deja al final del libro un glosario sobre ellos. Pero he de deciros que yo no me lié ni una sola vez. Era como si los conociera de toda la vida. Cada uno peculiar y distinto. No tuve ningún problema con los nombres.

En resumen, es un libro para pasar un buen rato y si os gusta la fantasía mezclada además con ciencia ficción, os encantará esta historia.

"Una novela sorprendente y super divertida, muy entretenida e ingeniosa. Fantasía y ciencia ficción se mezclan para formar una historia que te mantendrá enganchado en todo momento."
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