El patio de los quebrantos

He disfrutado mucho con la lectura de El patio de los quebrantos y el tiempo se me ha pasado volando. La vivencias de Jorge y su familia me ha hecho reflexionar sobre como una persona con ideales altruistas puede ser captado e introducido en un movimiento revolucionario que le marcará de por vida. Que le anulará como persona y le convertirá en una persona anónima.
El protagonista del libro, Jorge, rompe con todo lo que la sociedad considera bueno, la creencia en Dios, la autoridad a los mayores, las leyes, las instituciones, para vivir para y por la organización revolucionaria. Eso le llevó a la cárcel y a la tortura. Un personaje muy bien construido que evolucionará a lo largo de la historia y muy complejo.
A través de las páginas de la novela nos vamos introduciendo en las grandes desigualdades sociales que se vivía en Colombia en la década de los 70. Diferencias sociales en las mismas ciudades. La diferencia entre indígenas y colonos. Como estos últimos iban reduciendo a los indígenas al mínimo exponente, quitándoles las tierras, no permitiéndoles acceso a la educación, y al capricho de ellos. Es decir, La desigual repartición de la tierra y la falta de espacio para participación política dieron cabida al uso de la violencia y la lucha armada. Los grupos armados han justificado el uso de la violencia por considerarla el único método para poder transformar la sociedad y con la intención de no permitir cambios considerados como ilegítimos.

En el Patio de los quebrantos vemos el origen de las guerrillas en Colombia que se atribuye, entre otros aspectos, a la exclusión socioeconómica y a la falta de espacios para la libre participación política. Entre los sectores excluidos se destacan el ámbito universitario e intelectual, la población campesina e indígena. Observamos como se financiaba, como captaban a los jóvenes estudiantes para cambiar la sociedad y como se iban radicalizando.

A través de Jorge tendremos la experiencia de vivir en una cárcel de Colombia, la corrupción que hay en ellas, así como las torturas que practicaban a los activistas revolucionarios.
Es un libro de lectura ágil, que engancha desde el primer minuto de lectura. Muy interesante para conocer la situación social de Colombia en el momento en que empiezan a surgir las organizaciones revolucionarias. Colombia se ha caracterizado por una brecha social entre una élite política con fuerte presencia regional, latifundista y monopolizadora y por otro lado, grupos minoritarios como los indígenas, afrodescendientes y campesinos que no han contado con el mismo acceso a los derechos de propiedad ni a los servicios de Estado y todo eso está reflejado en la novela.

Autor

Carlos Ocampo Marín, (Armenia, Colombia), licenciado en Comunicación social y Periodismo por la universidad de Bogotá Jorge Tadeo Lozano. Ejerció como profesor, educador sindical e investigador y participó activamente en la lucha política por la justicia social. Luego se estableció en Suiza, en donde, después de un proceso de integración, trabajó como profesor de español, periodista y diseñador gráfico, antes de iniciar su formación como terapeuta. Cursó estudios en el Collège Romand y en el Institut d'Hypnose Théreapeutique en Suiza, país en el que permaneció 20 años. Posteriormente, se fue a vivir a España y continuó sus estudios en la UNED y en la escuela de terapia Gestalt-Guibor. En la actualidad reside en España y ejerce como terapeuta humanista.

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La historia nos narra la vida de Jorge en la Colombia de los años 60-70. Podemos ver la manera en la que Jorge se descubre a sí mismo y su relación con su familia.

El protagonista es aquello que yo llamo, la oveja negra positiva. Es decir, una persona que no entra dentro de lo que la gente espera de ella, pero sin embargo, sigue su camino en busca de la felicidad. La verdad es que Jorge me ha transmitido muchísimas emociones a lo largo del libro.

También podemos ver como era Colombia en esa época. Las diferencias entre las personas que viven ahí, las desigualdades entre ellos, la triste situación de los indígenas... La verdad es que más que un libro, pareciera que estás viendo un documental desde la perspectiva de uno de los habitantes.

He de decir que el libro me ha gustado bastante, es de lectura ágil y dinámica, es muy sencillo empatizar con los personajes y meterte en la historia. Sin embargo, ha habido momentos en los que esa agilidad de lectura se perdía por el camino haciéndoseme bastante tedioso de leer. Tal vez fuera la política dentro del relato, que aunque necesaria para entender el contexto en el que nos movemos, se me hacía un poco pesado.

En conclusión, es una obra muy completa, con personajes y experiencias muy reales. La ambientación también acompaña mucho.

Es la historia de un joven y su familia en la sociedad colombiana de los años 50-70. El protagonista, Jorge, descubre la injusticia social y comienza una militancia política que le llevará a ser perseguido y encarcelado.

El autor narra el camino interior que recorre Jorge entrelazado con todas las vivencias desde la adolescencia hasta su madurez. Nos describe las relaciones familiares, amorosas, de amistad y con sus compañeros de lucha.

La historia está muy bien narrada, es dinámica y se lee con interés. Es una historia triste y desesperanzada. La forma de contar la evolución del protagonista nos hace sentir su angustia y su impotencia ante la injusticia y la violencia de la sociedad colombiana.

El motivo por el que no doy 5 estrellas es porque me ha parecido un libro un poco frío. Es como un documental. Los sentimientos están acotados, ahogados; quizá es consecuencia de la dureza de la vida en ese tiempo, de la escasez y de la pobreza, de la lucha diaria.

De todas formas, me parece una lectura muy recomendable para conocer una parte de la historia de Colombia y quiero también valorar positivamente la construcción tan real de todos los personajes que aparecen en la novela.

Muchas gracias a Masa Crítica y a Ediciones Carena por su amabilidad al enviarme este ejemplar.