La historia del Heavy Metal

Este libro me ha parecido un maravilloso, completo e hilarante viaje a lo largo de la historia del Heavy Metal, pasando por varios de sus más célebres subgéneros.
Parte de la premisa de ser una preparación para un show cómico sobre el Heavy Metal (no tenía ni idea antes de leer este libro, pero parece ser que hay bastantes cómicos que centran su obra en el Metal). Este es un factor importante a tener en cuenta dado que como sucede con cualquier forma de humor, hay siempre una importante carga de subjetividad, no solo con respecto a aquello que al autor le parece gracioso, sino con respecto al punto de vista que tiene sobre ciertas manifestaciones musicales, por lo que cuando uno ve el rapapolvo que le da al glam metal y al nu metal, o sobre como da su opinión sobre ciertos grupos (pobrecillos los Trivium), hay que pararse un momento a pensar que a fin de cuentas es como Andrew O'Neill percibe estas cosas.
Puede que a más de uno esto le pueda echar hacia atrás y es perfectamente comprensible, pero a mi ha sido uno de los factores que más me ha enganchado del libro, porque aligera la lectura, amenizando una obra que con otro enfoque podría haber sido más tediosa.
Dejando al margen lo ya mencionado, el autor ha concebido viaje muy interesante a través del tiempo, desde las bases musicales sobre las que se cimentaría el Heavy Metal hasta el 2015. Hace hincapié en cuestiones que otras obras pasan por alto, como por ejemplo la influencia que el punk y el hardcore han tenido sobre el heavy metal en general y sobre ciertos géneros en particular o sobre cómo músicos como los Beatles fueron fundamentales para sentar las bases del Metal, algo que muchos puristas del género tratan de evitar a toda costa y que aquí se abraza sin tapujos.
No obstante, tiene sus puntos negativos, por ejemplo como se pasan por alto ciertos subgéneros de gran relevancia en el panorama metalero, siendo particularmente llamativo como se ignora por completo el Power Metal. No obstante, sus puntos negativos no son lo suficientemente graves como para restarle interés a este libro.
Tanto si te gusta el heavy metal, como si tan sólo tienes curiosidad, esta es una obra a la que merece la pena echarle un vistazo.

Recorrido por la historia del heavy metal, desde sus más lejanas raíces (blues...) hasta la atomización actual de subgéneros y afines.
Por un lado, el trabajo y la dedicación se hacen patentes desde la primera página: el autor ha hecho un gran esfuerzo por sintetizar y adecuar la información para dar forma a un discurso ameno, entretenido y compenetrado con el lector afín al mundillo. Repasa las "materias troncales" de la historia del heavy metal con una inteligente combinación de rigor histórico y chascarrillos hilarantes. Además, la edición y traducción han sido exquisitamente cuidadas en la edición española, lo cual torna amena la lectura sin perder su lógica interna.
No obstante, la obra peca de un exceso subjetivismo. Los chistes a veces se confunden con el propósito histórico, y más de una formación musical o (peor aún) subgénero del heavy metal, objetivamente relevantes en el panorama metalero, han sido omitidos por razones similares a "no me gustan" o "no me apetece escribir sobre ellos". La pasión del autor hacia algunos grupos y subgéneros se palpa en el entusiasmo y la extensión con los que escribe sobre ellos; pero esta visceralidad también se extiende, de forma inversa, a las zonas de la historia que no le agradan tanto. Esto es imperdonable en una obra cuyo título comienza por un artículo determinado: «"La" historia del heavy metal», y no «"Una" historia del heavy metal».
En conclusión, «La historia del heavy metal» es una obra maravillosamente narrada en cuanto a la trayectoria central de la evolución del heavy metal, pero en exceso subjetiva a la hora de dar cuenta de otros subgéneros, hasta el punto de que el título debería haber sido, a nuestro juicio, «La historia del heavy metal según A. O'Neill».

¿Por qué me he leído 300 páginas de la historia del heavy?, si ni siquiera soy un "jeviata" tal como dice el autor del libro, solo un amante de la música que se quedó anclado 30 años atrás.Pues porque el libro es divertido, el autor es cómico, líder de una banda heavy metal y todo un entendido de la música pero para mi solo me interesó las partes que hablaba de los primeros tiempos y del trahs metal de los 80, Metallica en estado puro.Cuando se pierde en desmenuzar los géneros, subgéneros, sub-subgeneros, y así hasta el infinito me pierdo bastante.Nunca pasé esa línea de cordura que separa el trash de lo que vino después: death-metal, satanismo y demás.Libro divertido para los que tengamos cierta edad y disfrutáramos (y aun disfrutamos) de los discos míticos de Metallica (los primeros claro, ja ja lo entenderéis si leeis el libro), Judas Priest, Black Sabbath, Slayer, Iron Maiden...aunque a los ojos de Andrew O'Neill yo soy un hereje que considera AC/DC un grupo heavy, además de haberme pasado al grunge a principios delos 90....no creo que este hombre me firme nunca un ejemplar de su libro, me lo tiraría a la cabeza.

El autor es humorista y monologuista, además de aficionado al heavy metal y miembro de un grupo dedicado a esta música. Basado en uno de sus monólogos desarrolla este ensayo, en el que expone la historia de este movimiento musical y de sus ramificaciones, desde sus orígenes hasta nuestros días.

Se nota que es un fanático de esta música y sabe de lo que habla, y si eres un fan de este estilo disfrutarás mucho con el libro, si no lo eres se hace un poco pesado, pero aprendes algo, si bien es verdad que la carga subjetiva es muy importante. Se echan de menos anécdotas de grupos y cantantes que se prometen en la carátula.