Entre dos tierras

Una historia de amor que parece imposible entre dos enemigos acérrimos, en plena guerra de los Cien Años entre Francia e Inglaterra, que debido al enfrentamiento de estos dos países están destinados a odiarse.

Y más imposible parece la situación de la protagonista femenina, Ryen, que siendo una mujer es nombrada caballero, ante el asombro de muchos y el rechazo de otros. Sale un poco fuera de la lógica que en pleno siglo XV y en un mundo de hombres, una mujer llegara a convertirse en caballero y en uno de los mejores guerreros de Francia, sin embargo creo que es uno de los personajes mejor construidos en esta novela. Una mujer que lucha por sus ideales y que quiere demostrar a todo el mundo su valía como caballero, y sobre todo, al que más quiere demostrárselo es a su padre, que es la persona que menos acepta su condición. Además hay que señalar su fuerte sentido del honor, y su humanidad hacia quienes más lo necesitan.

Y a pesar de que Ryen es un caballero, ante todo es una mujer, y como mujer se siente fuertemente atraída por un hombre. Lo que sucede en este caso, es que ese hombre es el enemigo. Bryce Princenton, uno de los líderes del ejército inglés, obsesionado con atrapar al Ángel de la Muerte, Ryen, por los estragos que en las tropas inglesas. Cuando descubre que se trata de una mujer su odio hacia ella se acrecienta, pero al mismo tiempo queda atrapado por su belleza.

Así surge entre ellos una relación de amor odio, patente en casi toda la novela. Un amor que no puede llegar a ser por el odio que se profesan como enemigos que son. Ambos son caballeros y como tales, deben lealtad a sus respectivos reinos, aunque llega un momento en el que deben plantearse quë es lo verdaderamente importante para ellos.

Entre dos tierras ofrece una historia muy bien construida, con el único inconveniente de que algunas partes pueden resultar un poco pesadas, como cuando Bryce se encuentra prisionero en el campamento francés, o todos los tiras y aflojas que se suceden entre los dos protagonistas, creo que es excesiva a veces tanta explicación. Aunque al mismo tiempo está llena de momentos intensos, llenos de emoción y amor entre los protagonistas.

Una gran novela, con unos personajes muy bien definidos, sobre todo el de Ryen que es muy original; ha sido un acierto por parte de la autora crear una protaginista así. Aunque sea en la ficción resulta muy grato imaginarse en esa época a una mujer con ese carácter, una mujer que no quiere ser como las demás, que actúa y toma sus propias decisiones, que quiere demostrar a todos que puede hacer lo mismo que cualquier hombre pero al mismo tiempo, siente y ama como una mujer. Ya por eso pienso que merece la pena leerlo.

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