Año uno

Antes que nada tengo que decir que este es un libro que jamás habría pensado que escribiría Nora Roberts, es verdad que tiene libros que van más allá del género romántico, pero incluso en esos libros su tema central es el romance y los demás temas que llega a tocar, como la magia, o asesinatos, pasa solo por encima de ellos, nunca la había visto profundizar en ello, al menos nunca en lo que he yo he le he leído.

Así que cuando leí la sinopsis de este libro me esperaba, si algo como lo que viene en el libro, pero para nada lo que me he encontrado.

Para empezar este libro es una mezcla de distopía y fantasía y aunque hay por ahí algunas parejas, son el resultado de que tenga muchos personajes, en absoluto nada que tenga que ver con la trama central que es básicamente un escenario apocalíptico donde el mundo se viene abajo gracias a una pandemia de un supuesto virus, pero además de todas las muertes causadas por esta enfermedad y la devastación social que eso conlleva también esa misma enfermedad ha sacado a la luz a seres con poderes de todo tipo, duendes, hadas, brujos, hechiceros, magos, gente con habilidades proféticas y telequinéticos, alquimistas, como ven Roberts no se ha dejado en la bolsa ningún tipo de ser de fantasía (aunque me faltan aún hombres lobos y vampiros, no descarto que también haya por ahí), y estos seres, como la sociedad misma, los hay buenos y los hay malos.

Sin embargo, estamos hablando de Nora Roberts y es inevitable que haya algunas escenas un poco pastelozas y románticas.

Este libro me recuerda mucho el de Apocalipsis de Stephen King, honestamente no tengo ni idea si se trata de un retelling, puede que no lo sea, pero al menos desde mi percepción podría serlo perfectamente, tiene muchas semejanzas con ese libro, pero contado desde un nuevo punto de vista y con seres mágicos.

Me ha sorprendido muchísimo encontrar a esta Nora Roberts, siempre he dicho que me gusta mucho la pulcritud de su estilo narrativo, a pesar de lo sencillas que a veces podían ser sus historias nunca se podía negar que era buena escritora y con este libro a mi parecer ha dado el salto hacía algo que se sale de su zona de confort utilizando su enorme capacidad narrativa y literaria para presentar un libro diferente a lo que nos tiene acostumbrados, me ha sorprendido gratamente.

En cuanto a la historia, está muy bien planteada, aunque a mi parecer hay momentos que tienen algunos huecos, cosas que no tienen mucha explicación y que uno tiene que adivinar, tiene situaciones que no me han resultado congruentes como cuando el grupo de Jonah y Arlys se instalan en esta pequeña ciudad que autodenominan “Nueva Esperanza”, no tiene mucho sentido porque pinta un lugar idílico en medio de un mundo donde hay guerras, donde el gobierno está persiguiendo tanto a personas inmunes como a los que tienen poderes, se instalan y todo está bien, no sé, no tiene mucho sentido para mí, pero no voy a adelantarme, falta mucho por recorrer en esta historia.

Sin embargo, más allá de las situaciones que a mi parecer no tienen mucha lógica (al menos hasta el momento), tengo que decir que es un libro que me ha gustado y que voy a seguir con los demás libros, necesito saber como acaba esto y de donde viene este “virus”, sin contar que me he encariñado de muchos personajes y me encantará saber como terminan.

Hablando de los personajes, son muchos, algunos aparecen de repente y honestamente en ocasiones me confundía y no sabía quién era quien, pero siempre tuve muy bien ubicados a los personajes principales, como he dicho, me han gustado, todos y cada uno de ellos y tengo que reconocer que algunos de ellos, no entiendo muy bien donde van a terminar quedando en esta historia y que espero que aparezcan nuevamente más adelante.