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Me alegro de haber decidido finalmente leer Siempre El Mismo Día, ya que definitivamente superó mis expectativas iniciales. La historia es sobre Emma y Dexter, a quienes seguimos durante el lapso de veinte años. Se reúnen por primera vez la noche de su graduación y luego desarrollan una relación complicada. Después de eso, Nicholls nos lleva al 15 de julio de cada año para ver qué les sucede a ambos en cada aniversario. Veinte años, dos personas, un día. Aunque los personajes no eran exactamente de mi agrado, disfruté leyendo sobre los cambios de perspectiva y amistad durante los años, y Nicholls pudo hacer algunos giros de la trama bastante grandes. Recomendado para aquellos que disfrutan del romance contemporáneo.
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