Sol de sangre

Hace unos meses leí “Sangre en la nieve” de Jo Nesbo, la primera novela de una serie atípica. Atípica porque las diferentes novelas no comparten protagonista, ni tramas ni nada; son novelas completamente independientes. Lo que hace que se pueda considerar que forman parte de una serie es que el protagonista de ambas es un sicario. Y, no sé cómo serán los títulos en noruego pero en la edición en español está claro que también están siguiendo una misma línea: si en la primera novela la sangre estaba en la nieve, en ésta no hay nieve sino sol. Eso sí, sangre sigue habiendo...

Jon ha tenido que huir. Se ha metido en un lío en Oslo y ha cogido un autobús sin destino conocido. al final, ha recalado en una pequeña aldea de Finnmark, llamada Kasund, muy al norte del país. Es verano y todo es luz, durante el día y durante la noche. Allí buscará un sitio donde esconderse. le ayudarán un sami (Mattis) y Lea (La hija del predicador local) y su pequeño hijo Knut

Como en la anterior novela, “Sol de sangre” está protagonizada por un sicario que huye. En este caso, porque ha robado y mentido al mayor capo de la droga de Oslo, “el Pescador” y éste ha mandado a otro sicario a matarle. “El Pescador” siempre encuentra a quienes persigue; por eso, la única posibilidad de Jon es no tener plan; no pensar en nada e improvisar la huida. Pero cuando llega a Kasund, se siente tentado a quedarse. Por un lado, la cabaña que le presta Lea, totalmente aislada, le parece un buen sitio para esconderse. También lo es la comunidad: en la aldea vive poca gente y nadie se mete en los asuntos de los demás. No vamos a negar que el precioso pelo negro de Lea influye un poco en su decisión. Armado de un revólver y de un rifle, decide esperar allí a quien vaya en su busca que, está seguro, acabará encontrándole.

En esta serie, Nesbo pretende mostrarnos la otra cara del espejo. Son novelas que no protagonizan policías o detectives, los que persiguen a los malos sino, precisamente, los perseguidos, los malos. En “Sangre en la nieve” el protagonista era Olav, un asesino a sueldo. En “Sol de sangre” el protagonista se dedica a pasar droga y, si se tercia, a realizar otros encargos que le manda el Pescador. Pero, como en la novela anterior, Jon (o Ulf como se hace llamar en su nuevo destino) casi acaba cayéndonos simpático. También es verdad que no es un malo tan malo como Olav pero la razón principal es que tiene un motivo poderoso para hacer lo que hace. No le justificamos pero le entendemos. Además, Jon/Ulf es el narrador de la novela y nos cuenta las cosas sin pelos en la lengua, sin justificarse, sin mostrarse mejor de lo que es. Además, nos muestra que tiene sentimientos y un cierto código de conducta.

Al mismo tiempo que acompañamos a Jon/Ulf en su aventura, sabremos cosas de su pasado: cómo empezó a pasar droga, cómo empezó a trabajar para el Pescador, su vida personal, qué le mueve a actuar, etc… No es una novela en la que se haga un dibujo exhaustivo del personaje –la historia no lo requiere ni la corta extensión de la novela lo permite- pero, aún así, acabaremos conociendo bastante bien a su protagonista y también algunas cosillas del lugar en el que ha recalado. A este respecto, me ha interesado especialmente lo que se cuenta sobre la cultura sami (ya había tenido ocasión de leer alguna otra novela negra nórdica situada en territorio sami y me había interesado igualmente) y, cosa que no conocía, sobre la religión laestediana. Lo referente a esta religión me ha parecido como trasladarme dos siglos atrás en el tiempo. También es verdad que la historia se sitúa en los años setenta, es posible que desde entonces hayan evolucionado algo.

La novela se estructura en diecisiete capítulos de no muy larga extensión. Como he dicho antes, es el propio Ulf o Jon el narrador protagonista. Utiliza una prosa sencilla y directa, sin grandes artificios. En ella predomina el diálogo lo que, unido a la facilidad de lectura y al ritmo medio, consigue que las páginas pasen rápido y que el libro se lea en dos ratos.

Conclusión final

Me gustó “Sangre en la nieve” y me ha gustado “Sol de sangre”. Dos novelas diferentes a las que solía escribir Nesbo, las protagonizadas por Harry Hole pero una buena opción para adentrase en sus historias. Una novela corta de muy ágil lectura. Recomendable.

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Sol de sangre es la segunda entrega de una nueva serie: Sicarios de Oslo. Novelas en principio independientes con un único nexo en común: están protagonizadas por sicarios.
De momento (no sé si habrá más) está formada por los siguientes títulos:
-Sangre en la nieve
-Sol de medianoche

Si en el caso de Sangre en la nieve teníamos a un sicario que se dedicaba a eso porque no sabía hacer otra cosa, en el caso de Sol de sangre el presunto sicario no es tal. Simplemente le atribuyen algo que él no hizo y aprovecha para irse ganando la vida como cobrador de morosos para su jefe El Pescador.
Todo porque necesita dinero para salvar la vida de su pequeña, con una leucemia que requeriría como última solución una carísima medicación.
La cosa parece ir funcionando hasta que un día ve la oportunidad de solucionar el problema económico para salvar a su hija y engaña a El Pescador que terminará descubriendo el pastel y mandando a alguien para que lo mate.
Tremendo sicario éste que ni siquiera es capaz de apretar el gatillo cuando su vida está en peligro. Pero consigue huir y se va hacia el fin del mundo sin rumbo fijo. Un fin del mundo que no es otro que el norte de Noruega, donde el mar es el límite más alejado.

Es aquí donde el autor aprovecha para mostrarnos una Noruega que poco o nada tiene que ver con la que nos presenta en sus novelas, mucho más capitalinas pues la mayor parte están ambientadas en Oslo.
Allí la dura y fría naturaleza es la protagonista, en un lugar con etnias y costumbres totalmente distintas. Incluso con una secta religiosa mucho más estricta en temas religiosos que los católicos y los protestantes.
Gente que lleva muchos años sobreviviendo a duras penas de la pesca y de los renos. Una comunidad muy cerrada pero en la que el que ahora dice llamarse Ulf encuentra apoyo y escondrijo para un encuentro que sabe que tarde o temprano será inevitable, pues el Pescador siempre encuentra a los que de él huyen o lo han traicionado.


En el relato, que es narrado en primera persona, no he podido menos que sentirme angustiado en la piel de este hombre que, a pesar de sus muchos defectos, no deja de ser un buen hombre.
Porque no sabe cuál es el principio, pero sí que está convencido de cuál es el inevitable final del mismo. ¿O tal vez no?




OPINIÓN PERSONAL

La serie Sicarios de Oslo es la oportunidad para aquellos que no conocen a Jo Nesbo de acercarse a sus novelas, porque no solo son totalmente independientes de la serie de Harry Hole, sino que incluso son independientes entre sí y puedes leerlas en cualquier orden y acercarte al universo de este autor.
También es verdad que son dos novelas más ligeras, no solo en cuanto a tamaño pues ninguna de ellas llega a las trescientas páginas y encima con letra grande, sino que no tienen la dureza que en muchos momentos podemos encontrar en la serie Harry Hole.
Todo sin duda debido al toque tan humano con el que viste a sus protagonistas. Profesionales de la muerte que sin embargo están muy lejos del perfil duro y despiadado que se les supone, de un modo muy especial el de Sol de sangre.
Porque la dureza del tema a tratar, que no deja de ser otro que hombres que viven de matar a otros hombres, está muy suavizado no solo por toques de humor, muy especialmente en Sangre en la nieve, sino por un toque muy humano y sensible en los personajes que protagonizan la novela. O en los que les acompañan, como es en esta novela Lea, la hija del líder de la secta y el hijo que la acompaña. Ambos con un duro pasado a cuestas y muy necesitados de amor.

Porque curiosamente, entre tanta violencia y muerte, lo que más destaca en esta novela es ese toque luminoso que brilla por encima de ese sol de sangre que ilumina durante meses perpetuamente un paisaje del que todos hablan como muy bello, pero que no deja de ser un páramo visitado si acaso por los renos.

¿Habrá una tercera entrega? Ojalá, porque me ha conquistado.
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Vuelve Jo Nesbo con su saga de “Sicarios de Oslo”. El primer libro tuve la oportunidad de leerlo este verano y aunque me sorprendió porque es distinto a la saga de Harry Hole me gustó. Se titula «Sangre en la nieve» y puedes leer mi opinión clicando en el título. Ahora nos presenta «Sol de sangre» y lo he disfrutado más que el anterior, imagino porque ya sabía lo que me iba a encontrar, aunque sea una saga se pueden leer de forma independiente.

El protagonista es Jon o Ulf que es como se da a conocer cuando llega a un pequeño y recóndito lugar del norte de Noruega. Llega huyendo de “El Pescador” que es el rey del crimen organizado de Oslo y tiene motivos para temerle ya que éste siempre encuentro a los que se la juegan. Su mejor plan es la improvisación y aunque llega con idea de estar poco tiempo en este lugar al final cree que la cabaña que le han prestado es un buen lugar para estar escondido.

Jon es un sicario que no actúo con valentía como se esperaba de él y no le quedó más remedio que Salir huyendo. En esta pequeña aldea de Finnmark encontrará cobijo y esperará a que los hombres de “El Pescador” lleguen porque eso es lo único que tiene claro Jon, que le encontrarán.

La trama de «Sol de sangre» es más sencilla que las novelas protagonizadas por Harry Hole pero esto no quiere decir que no sea intensa y que haya momentos de tensión, esta saga está compuesta por novelas de tamaño menor que se leen prácticamente de una sola vez.

Consta de una atractiva ambientación en un lugar alejado de todo y donde Jo Nesbo nos da a conocer aspectos interesantes y para mí, desconocidos, acerca de la cultura sami y la religión laestediana. Es una de las cosas que más me han llamado la atención de «Sol de sangre» ya que es una cultura muy distinta a la nuestra y con unas normas muy estrictas en temas religiosos, aunque hay que tener en cuenta que los hechos ocurren en la década de los setenta.

Jon es el encargado de contarnos esta historia y recurre en numerosas ocasiones a escenas del pasado para que entendamos cómo y porqué ha llegado a esta situación. En «Sol de sangre» entendemos, aunque no compartamos la forma de actuar de los sicarios, y creo que Nesbo intenta mostrarnos un punto de vista distinto.

Os recomiendo leer «Sol de sangre» tanto si ya conocíais a Jo Nesbo para encontraros con él en unas historias distintas, pero igual de interesantes y atrayentes para el lector como si os queréis iniciar en sus libros, creo que os gustará. Yo me quedo a la espera del siguiente libro de esta serie de “Sicarios de Oslo”.
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Lo primero que os tengo que decir es que esta es en teoría la segunda entrega, que tenemos una saga que comparten similitudes en trama, en temática (va de sicarios) e incluso en portada, pero tanto una como otra se pueden leer independientemente, así que si esta novela cae en vuestras manos no tengáis reparos por no haber leído la primera. El protagonista va a ser distinto, aunque sí es otro "sicario" y pongo entre comillas lo de sicario, porque en verdad no ha matado a nadie, hubo un malentendido, y El Pescador lo captó para que cobrara a sus morosos, incluso matándolos si hace falta. Pero a la hora de la verdad, Jon (que para los demás se hace llamar Ulf) no es capaz de matar a nadie, así están las cosas.

El protagonista tiene un problema gordo de índole personal, y en un encargo de El Pescador, que es el mafioso más gordo del momento y al que conoceremos en la novela anterior (pero insisto, no hay problema para leer esta directamente), ve su única salida para solucionar su problema, así pues, como no tiene nada que perder y él ya de por sí es un perdedor, se la juega a su jefe y no le queda otra que largarse, porque es hombre muerto, y recordemos que él no es capaz de disparar ni en defensa propia.

¿Y dónde se va nuestro protagonista? Pues acabará en Kasund, una pequeña aldea al norte del país, donde sigue el frío y donde el sol no se pone, ni durante el día ni durante la noche, esta mezcla entre el clima y la eterna luz nos vuelve a recordar la historia de un hombre que busca redención. En ambos casos se trata de un sicario que huye, y en ambos casos el protagonista nos va a caer bien, vamos a empatizar con él y vamos a querer que lo suye acabe bien. Pero la cosa pinta mal.

La ambientación vuelve a estar muy bien conseguida, veremos que esa eterna luz complica que el protagonista pueda dormir, por eso siempre está en una duermevela eterna y sus sentidos no están al 100%, es complicada su situación y cometerá errores, al menos está en una cabaña escondido ayudado por por Lea, la hija del predicador de la aldea, y su hijo Knut.

Pero como en estas dos novelas vamos a encontrar a protagonistas que en el fondo son buenos, Jon no podrá evitar introducirse en los problemas propios de esta comunidad tan cerrada: Lea con un matrimonio complicado con malos tratos, abusos, una comunidad de fanáticos que es casi una secta con el padre de Lea a la cabeza, que es un lider ultraconservador y no se lo pondrá fácil al "forastero", un amor que surge que es totalmente incompatible (o no?), y al final no le queda otra que actuar, aún sabiendo que su muerte está cada vez más cerca.

Con escenas de acción, escenas de tensión, y una espectacular escena un tanto gore y escatológica muy gráfica que a mí me ha encantado aunque quizás no es apta para estómagos sensibles. Así que en cada libro tengo una escena preferida que recordaré durante mucho tiempo.

Estructuralmente, tanto esta novela como su antecesora cuentan con capítulos cortos narrados por el propio protagonista, lo que hace que nos acerquemos más a él. Es una prosa sencilla que no necesita mucha enjundia, con bastantes diálogos, y como he dicho ya, con muchos toques de humor negro e ironía.

Como no he leído nada más del autor, no puedo comparar. Mucha gente seguidora de su gran éxito Harry Hole dicen que estas novelas se ha desinflado, que se ha vuelvo más blando, más romántico... Pero en sus novelas siempre hay una línea muy fina entre el amor y la muerte. A mí estas novelas me parecen ideales para introducirte en su universo, y ver si el autor te gusta o no y quieres seguir leyéndolo. A mí me ha resultado una lectura positiva, que me ha durado un suspiro y yo repetiré!
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“Pero creía en la muerte. Esa era una promesa que tenía la certeza de que iba a cumplirse. Creía en una bala de nueve milímetros a mil kilómetros por hora. Y que la vida era el tiempo que transcurría desde que salía del cañón del arma hasta que se abría paso por tu cerebro” ~ Sol de sangre de Jo Nesbø.

Un hombre llega a la región de Finnmark al Norte de Noruega y se baja del autobús en un pueblo llamado Kasund. Alega que es cazador pero viaja sin armas y aún no es temporada de caza. El hombre es Jon pero se hace llamar Ulf y escapa de alguien.

Ulf se queda en el pueblo gracias a la hospitalidad de Lea y de su hijo Knut. Se acomoda en una cabaña de caza y poco a poco toma contacto con el resto de vecinos mientras vigila y espera a que vengan a darle caza.

La historia intercala el presente de Ulf en el pueblo con su pasado, como se metió en el mundo de las drogas y qué hizo para que ahora sea la presa y no el cazador.

Es el segundo libro de la serie Sicarios de Nesbø. El primero, Sangre en la nieve, lo leí a comienzos de año y reconozco que no me entusiasmó, quizá porque esperaba otra cosa. Con Sol de sangre ya sabía a lo que me enfrentaba y quizá por eso lo he disfrutado más. Nesbø tiene una forma de escribir clara y directa y un estilo que me gusta aunque no he leído mucho de él.

Los libros son cortitos e independientes. No tienen que ver los personajes de uno y de otro. Quizá lo que Nesbø quiere mostrar es el lado humano de los malos, sobre todo cuando meten la pata y se convierten en presas. Creo que debería releer el primero porque en aquel momento mis expectativas eran otras y quizá ahora cambien bastante.