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Jo Nesbo es todo un referente del noir nórdico y uno de los pocos autores que sigo con verdadera devoción. Por eso os podéis imaginar mi entusiasmo cuando tuve noticias sobre la publicación de este nuevo título. Aviso a los fanáticos del icónico Harry Hole que os vais a encontrar algo diferente a lo que nos tiene acostumbrados, porque el protagonista de "Sangre en la nieve" carece del magnetismo y la esencia del policía roto y de velada moralidad. Hoy os traigo mis impresiones sobre la primera novela del ciclo "Sicarios de Oslo" que, a día de hoy, tiene publicadas en su idioma natal solo dos entregas, ambientadas en Oslo en torno a los años setenta, protagonizadas por antihéroes imperfectos. Un thriller tan breve que carece de la complejidad y profundidad, tanto en la historia como en los personajes, que se podría esperar de un autor como Jo Nesbo. Con esto no estoy diciendo que sea una mala novela, sino que su exigua extensión, de tan solo doscientas páginas, es un obstáculo para desarrollar una trama consistente con unos personajes de peso. Toda la acción va a transcurrir durante una ola de frío en las navidades de 1977, cuando la ciudad de Oslo sufre las temperaturas más bajas jamás registradas. Olav Johansen, protagonista y narrador en primera persona, no se considera particularmente inteligente, no tiene talento suficiente para casi nada, pero sobrevive trabajando desde hace cuatro años como sicario a sueldo de uno de los principales repartidores de éxtasis de la ciudad. Cuando su jefe le encarga un nuevo trabajo todo se complica para él… "Sangre en la nieve" ha resultado ser una novela correctamente escrita con una prosa sencilla y contundente que articula su argumento en un total de veintiún capítulos de corta extensión. Con una narrativa muy visual que contribuye a dar fluidez a la lectura, de cadencia constante e intriga sutil con la que su autor nos hará descender al inframundo de la ciudad de Oslo, de la mano de un narrador protagonista que ofrece la posibilidad de empatizar con él a pesar de ser poco fiable porque todo lo que experimentamos lo vemos a través de sus ojos, quedando la historia sesgada, donde el crimen organizado, el narcotráfico y la prostitución campan a sus anchas. Un título que a pesar de emplazar su ambientación a finales de los años setenta, perfectamente podría transcurrir en cualquier lugar y momento, ya que el mal está presente allí donde el hombre se encuentre. La novela carece de un vasto friso de personajes, siendo los típicos clichés de este género, aunque Jo Nesbo ha conseguido sintetizar lo más destacable de cada uno de ellos para que el lector pueda identificarlos sin problema. Destaca por encima de todos, como una farola en una noche sin luna, el de su protagonista principal. Olav es inteligente pero imperfecto y lleva una vida solitaria porque como asesino no es fácil acercarse a otras personas. Ha leído mucho a pesar de su dislexia, pero son sus otros "defectos" los que lo hacen especial. Es un tipo ingenuo al que le cuesta reconocer que tiene un buen corazón y eso le hace cometer un error fatal en su último encargo, cambiando el juego para él. La búsqueda de algo bueno, tras una vida dedicada a causar la muerte, expondrá sus debilidades. Sintetizando: "Sangre en la nieve" es un thriller nórdico de corta extensión y final inesperado que se aleja de todo lo que su autor nos tiene acostumbrados. Un soplo de aire fresco de un escritor que probablemente quiso innovar un poco con este proyecto alternativo, donde se incluyen ciertas pinceladas de humor para rebajar el dramatismo y la tensión. La historia de un asesino a sueldo que, cuando siente el poder redentor del amor, deberá tomar algunas decisiones difíciles que le acabarán complicando la vida. Una novela donde la acción y el lenguaje fluyen sin esfuerzo, con un estilo narrativo claro y espartano, que recomiendo a los neófitos de este género literario en general y los escépticos que aun no se han adentrado en la obra del autor en particular. Enlace: https://www.mislecturas.es/2.. |
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