 |
Desde hace mucho quería empezar esta saga policíaca, ya que es un género que por lo general nunca me defrauda. Con esta novela, Jo Nesbø, se inició en el mundo de la escritura en el año 1997 y lo combinó con su carrera como cantante, en el grupo di Derre, conocido en su país de origen (Noruega). Además ganó el premio a la mejor novela negra noruega y el premio a la mejor novela negra de los países nórdicos. Este es el primero de 12 libros (el último publicado en 2019) en donde nos cuenta la vida del inspector de policía Harry Hole. Aquí es enviado hasta Australia para investigar el caso de la muerte por estrangulamiento y violación de una ciudadana noruega, residente en ese país: Igner Holter. Al llegar le asignan como compañero a Andrew Kesington, un aborigen, que después de un pasado un tanto oscuro se ha labrado una carrera en la policía. Gracias a él nos hacemos una idea bastante buena de lo que es la vida en Sydney. También mediante leyendas conocemos el pasado de sus habitantes y como persiste todavía esa diferencia de culturas entre los aborígenes y el resto. El título se debe a una de ellas, ya que "El murciélago" representa la muerte. En este libro la trama me ha parecido algo floja. Pausadamente nos va sumergiendo entre las páginas, para ir subiendo la intensidad a medida que avanzamos y casi en la recta final, descubres que no puedes parar de leer porque ansías saber cómo se resuelve todo. Lo que más interesante me ha parecido es conocer a Harry Hole, que aunque está bastante estereotipado (pasado conflictivo, amigo de la botella y dudosos métodos en nombre de la ley), me ha parecido que puede terminar encantandome a medida que vaya avanzando en la saga. También he de decir que es experto en meterse en líos y en cagarla a lo grande, cosa que puede ir dando bastante juego. Me recomendaron que empezará con el tercero (Petirrojo) y que éste y Cucarachas que es el segundo, me lo podría ahorrar. Pero... A mi me encanta conocer todo desde el principio y aunque flojeara en algunos aspectos, la verdad es que me dejó con ganas de continuar. Espero no arrepentirme |
>
