El caso Kurílov

Si hace veinte años eran minoría los que conocían a Irene Nemirovski, en la actualidad son pocos los que no han leído alguna de sus obras. Desde el descubrimiento y publicación de Suite francesa, el éxito de la escritora rusa de origen judío ha ido en aumento y durante los últimos años se han ido sucediendo las ediciones en castellano de obras no traducidas o inéditas.
Entre estas últimas se encuentra la novela que hoy reseño, El caso Kurílov, editada por Salamandra hace ya un tiempo. El argumento de la obra es sencillo: Lonya, bolchevique por herencia familiar, cuenta su implicación personal en el atentado que acabó con la vida de Kurílov, primer ministro del zar Nicolás II, conocido por el pueblo por su frialdad y crueldad. Lo que podría haberse contado como un bestseller se convierte en una obra destacada gracias a la sensibiblidad de la autora y a técnica narrativa.
La novela se inicia con una primera escena, narrada por un narrador externo, que, como si fuera una cámara de cine, nos refiere el encuentro de dos hombres de mediana edad en una café de Niza. Uno es Lonya, el otro, el policía encargado de investigar los hechos que rodearon el caso Kurílov. Durante su conversación Lonya mantiene su anonimato y se niega a explicar su participación en los hechos.
La segunda parte de la novela está formada por un manuscrito encontrado en la casa de Niza, a la muerte de Lonya, en el que éste explica en primera persona su implicación en el caso Kurílov, desde sus inicios como revolucionario, hasta su entrada en calidad de médico suizo en casa de Kurílov, pasando por su observación del carácter de este personaje y la transformación en la forma de pensar de Lonya, que pasa de una fría e implacable incomprensión hacia el primer ministro a la empatía con el mismo.
Además del análisis psicológico de los personajes y la explicación de su evolución interior, la narración destaca por su ritmo, ni lento ni frenético y que atrapa desde el principio así como por su ubicación en un momento histórico de máxima efervescencia. Otro aspecto destacado de esta novela es la variedad de temas que aborda: la compasión, la lealtad, el odio, el azar, la ambición, la vanidad de las cosas del mundo y la muerte son algunos de los más destacados.
Una novela accesible para todos, que admite varios niveles de lectura.

El caso Kurílov de Irène Némirovsky es una novela cuyo escenario es la Rusia de los últimos días de los zares. León M. viaja mediante sus recuerdos al tiempo en que era parte de los primeros revolucionarios quienes planeaban destituir la monarquía rusa. La misión de León era asesinar al ministro de Instrucción Pública, Valerian Alexándrovich Kurílov, mediante infiltrarse de alguna manera en su residencia sin levantar sospechas. Kurílov era protegido del zar Alejandro III y el príncipe Nelrode. León M., el Bolchevique, fue introducido al ministro como el joven médico suizo Legrand. Kurílov padecía una enfermedad y no confiaba en sus antiguos médicos tal como el ya conocido de años, Langenberg. de hecho, León ahora Legrand, detectó cáncer en el hígado y recomendaba al ministro reposo. Legrand viajo a las islas junto al ministro, su esposa Marguerite, su hija Ivana y el pequeño Iván para pasar una temporada con ellos y vigilar la salud del Cachalote como era conocido el ministro. En las islas se reunían personalidades distinguidas como el príncipe Nelrode y otros ministros para dialogar acerca la de Revolución y cómo detenerla. Legrand o León se enteró de algunas revueltas y daba información a Fanny, una compañera de la revolución. Sin embargo, el joven comenzó a declinar en su cometido resultado de la convivencia con el Cachalote y fue otra persona quien realizó el atentado. La narración contiene muchas reflexiones del joven en cuanto a su relación con el ministro y en ciertos momentos muestra comprensión y no lo mira como un enemigo. Una vez más, la autora me sorprende con la manera que cada personaje procede y reflexiona, ninguno es igual a otro en la historia ni en los otros libros de ellas. Recomiendo a todo tipo de lector El caso Kurílov especialmente a quienes se interesen por la Rusia de los últimos zares.

Descubrí a esta autora gracias a un reto de lectura 12 meses / 12 autoras. Primero me leí El baile, que es un relato cortito y que me gustó bastante, así que me animé con este: el relato de preparación de un atentado contra un primer ministro en tiempos del Zar me pareció muy interesante.

No voy a mentir: me costó entrar en materia.. no conseguía concentrarme en los primeros capítulos. Pero poco a poco conseguí meterme en la historia, contada a través de los ojos del supuesto asesino. El final me lo sospeché hacia mitad del libro, aunque eso no quitó que lo disfrutara igualmente. Las descripciones que hace la autora son maravillosas y me sumergieron totalmente en la época y ambiente.

Le doy un 3.5, porque me ha gustado bastante, pero tampoco lo leería otra vez.

De todas las novelas que he leído de la autora, está quizás sea de mis favoritas. Es una historia corta y con una trama sencilla y previsible, pues ya desde el principio se deja entrever qué es lo que va a pasar, pero aún así te mantiene pendiente de cada momento por lo que consigue transmitir a través de sus personajes principales.