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Tiempo de guerra comienza exactamente tal y donde nos dejó su antecesor Tiempo de osadía. Ylandra está sumida en el caos. Por un lado la república lucha por mantener el poder pero la monarquía no se queda atrás por restaurarse. No se sabe en quien confiar, en cualquier momento se puede dar de bruces con un traidor por lo que, será complicado combatir al verdadero enemigo que si bien venía de camino, ahora ha llegado. La academia lucha por sobrevivir en medio de todas las profecías que anuncian su destrucción y viéndose obligada a revivir oscuros y pasados tiempos. La orden de Addai lucha por mantener Ylandra unida ante la amenaza de los Tres y los Anirios junto al Inferus fraguando su revolución hacia la libertad despacio pero sin pausa.... No sabéis las ganas que tenía de adentrarme nuevamente en Ylandra, seguir conociendo ese mundo tan complejo creado por Roberto Navarro Montes que, personalmente a mí me maravilla y que, si ya lo de escribir un género como el fantástico me parece algo de admirar, lo de Roberto ya se sale de los cánones. Lo malo de esperar tanto tiempo entre libro y libro y más en libros como estos donde tantas cosas suceden -a parte de que es desesperante pues, sale la vena curiosa y sientes la necesidad de saber qué pasará tanto con Ylandra como con esos personajes que su situación se queda pendiendo de un hilo- es que, no es que me haya costado arrancar con este pero sí me ha costado un poquito volver a cuadrar a cada personaje en su lugar y de hecho durante los primeros capítulos han habido veces que me ha tocado regresar para volver a mirar quién estaba narrando y recordar quien era exactamente pues, en mi mente lo había confundido y no me cuadraba lo que me estaba costando. La ambientación, en lo personal creo que es de lo mejorcito de estos libros. Todo el mundo que ha creado Roberto, con una estructura sólida hasta el mínimo detalle tanto que incluso es capaz de traspasar las fronteras de lo fantástico hasta convertirse en algo real y creíble. Si bien el autor ya nos introdujo en él en el primer libro, centrándose ahora más en los personajes y subtramas, todavía vamos conociendo nuevas pinceladas. En cuanto a los personajes, si ya me encantaron en Tiempos de Osadía, en este segundo volumen de la saga Roberto se centra mucho más en ellos. Ya de por sí tan complejos como la historia en sí y con una evolución constante e in crescendo. Unos personajes que traspasan el papel de las páginas, lo que nos hace conectar con ellos e incluso sentirnos identificados con más de uno. Unos personajes que sufren, que luchan por lo que quieren, que toman decisiones -aunque algunas arriesgadas siempre creyendo que es la acertada- y que se equivocan pero que lo asumen y aprenden de ello. En esta segunda parte Roberto ahonda más en las historias de todos ellos, incluso nos da a conocer más de aquellos que en el primer libro solo se nombró de pasada y que, gracias a estos vamos conociendo un poco más otro más relevantes hasta ahora. Con sus buenas 612 páginas, que no os asuste tal extensión -porque imponer, hay que reconocer que impone- y, aunque no es un libro que se consideraría de "lectura ligera" por todo el detalle e información que contiene, si que es cierto que el autor posee el don de darnos una lectura adictiva e incluso ágil. Roberto nos deja con ganas de saber más capítulo a capítulo introduciendo giros constantes que nos hacen cambiar de parecer en cuanto a lo que vamos creyendo que va a pasar, además también ayuda el hecho de que cada capítulo nos viene narrado bajo el punto de vista de cada personaje lo que le quita monotonía. Tiempo de guerra es una segunda parte de saga, más oscura cargada de acción, secretos, traiciones,... en la que están ocurriendo cosas constantemente, que ahonda mucho más en sus personajes, que se sale de los cánones establecidos y engancha tanto o más que su antecesor y que nos hace quedarnos con unas ganas desesperantes de Revolución. Enlace: https://krazybookobsession.b.. |
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